Las cifras llegan en un momento de discusión sobre la construcción de un estadio para la ceremonia de inauguración y clausura de los Juegos en Pyeongchang. Ante el esfuerzo económico, la provincia de Kangwon amenazó con renunciar a los derechos para organizar el evento si el gobierno central no se comprometía a asumir una gran parte de los costos.
El comité organizador descartó que se tratase de una amenaza y habló más bien de una «apelación». Pero el debate dejó clara la existencia de problemas. Bajo un nuevo plan, el gobierno se hará ahora cargo del 50 por ciento de los costos, mientras que el POCOG y la provincia se repartirán la otra mitad a partes iguales. El Comité Olímpico Internacional (COI) sugirió además a los organizadores locales que las competencias de bobsleigh, luge y skeleton se disputen en otro país para reducir los costos.