Nolito cumplió ayer uno de sus sueños. Debutó con la selección en un partido en el que reconoció que «he pensado en mucha gente y en muchas cosas», y en el que afirmó que sobre todo, había estado «muy contento y muy feliz por debutar con la selección». El gaditano reconoció que su primer partido con los de Del Bosque no había podido ser perfecto porque «hemos perdido con ese gol tonto, un zapatazo, pero por mí muy feliz y contento», reiteró. «He disfrutado desde que llegué a la concentración como un niño pequeño».
El futbolista del Celta no ocultó que convertirse en internacional era un sueño. «Sí, para mí y para cualquier jugador de España lo es todo, sobre todo por ser una de las mejores selecciones del mundo». Es consciente de que ganarse un hueco en la selección no es sencillo, pero « que nos quiten lo bailado». Tiene claro que repetir en una convocatoria pasa por «hacer las cosas bien en mi equipo será lo que me llevará de nuevo». De ahí que desde hoy, pensará únicamente en el Celta.
Nolito agradeció el respaldo de Balaídos, que cerró filas con el céltico, y explicó que el apoyo de la afición no le había sorprendido. «Sé que me quieren, y esto es algo que no se paga con dinero. El cariño de la gente, que me lo ha demostrado cuando las cosas no tan bien el año pasado, no se pagan».
El nuevo internacional de España, que tuvo en la grada a parte de su familia, se llevó para casa la camiseta de su debut con la selección.