El exfutbolista coordina los fichajes del equipo de la localidad más pequeña de toda la Segunda B
17 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Nando Castro Pena trabaja para que el Somozas pelee entre gigantes en la Segunda B. Conoce la casa como nadie. Llegó al club, entonces presidido por Manuel Candocia, hace diez años, seducido por una propuesta que llevaba aparejada una oferta de trabajo en Gamesa. El equipo estaba entonces en Segunda Autonómica, y a partir de ahí describió una insólita progresión desde el fútbol más modesto hasta la Segunda B. El exjugador pontés fue el único que vivió toda la escalada, y solo se perdió el último ascenso, cuando ya trabajaba en la parcela administrativa de la entidad.
-¿Cuál es su mejor recuerdo con la camiseta del Somozas?
-El ascenso a Tercera contra el Barbadás. Ganamos en su campo por 0-1 con un tanto de Sueiro y luego celebramos el ascenso en casa, en un partido en el que tuve la suerte de meter un gol y dar la asistencia del segundo a Iñaki.
-Se retiró justo un año antes del ascenso a Segunda B. Ya es puntería...
-Algunos futbolistas estudian y entrenan. Yo empecé a trabajar con 18 años y compatibilizaba mi jornada de 40 horas semanales con cuatro días de entrenamientos más otro de partido. Llegó un momento en que mi cabeza y mi cuerpo pedían otra cosa. Y quizá ya no daba el nivel de exigencia de Tercera.
-¿A los clubes rivales aún les cuesta identificar As Somozas en el mapa, ¿Le ha llamado alguno para preguntar?
-Sí, les cuesta mucho. Algunos equipos llaman para preguntar por donde llegan. Se interesan por donde está la ciudad y yo les digo que As Somozas es un pueblo pequeñito, a quince minutos de As Pontes y a media hora de Ferrol. Los voy situando. Al principio les sorprende, pero cuando llegan y ven las instalaciones y los medios que tenemos, les causa una gran impresión.
-Son un club modesto, ¿de cuánto no pasa un sueldo de un jugador del Somozas?
-No me gusta hablar de cifras. A los jugadores les da para el día a día y pagar sus estudios, pero no para tirar cohetes. No hay sueldos de 1.800 o 2.000 euros.
-Si jugasen a la Lotería de Navidad y ganasen dos millones de euros, ¿qué harían con ellos?
-No desperdiciarlos y mejorar algunas cosas. Pero, cuando decidimos ascender, la directiva evitó hipotecarse. Subir es un premio, una experiencia que disfrutamos. Si nos salvamos, mejor; si mañana no conseguimos la permanencia, sería una desilusión pero no un desastre ni nada.
-Si tuviese dinero, ¿a quién ficharía?
-Pensando en los jugadores de nuestra categoría, sin mirar más arriba, me salen Joselu o Pablo Rey, un buen amigo y un futbolista excelente.
-Candocia les había prometido un viaje a Ibiza por subir a Tercera.
-Cuando ascendimos a Preferente, nos pagó un viaje a directivos y jugadores a Mallorca. Nos fuimos 25 personas un fin de semana, una experiencia divertidísima, como un viaje de fin de curso de Octavo de EGB, pero con 25 años y con dinero. En la campaña siguiente, como podíamos subir a Tercera, le pedimos ir a Ibiza, pero fue imposible que entre todos nos pusiésemos de acuerdo en una fecha. Así que Manolo nos dio el dinero del viaje como una prima.
-Para el Somozas, la salvación en Segunda B sería un éxito como para otro jugar la Champions.
-Sí, se podría comparar. Salvarnos sería como la Champions.