Cheick Diabate y varios futbolistas negros de su equipo le dedicaron un gol la pasada jornada
10 nov 2014 . Actualizado a las 22:04 h.Willy Sagnol se emocionó el pasado fin de semana cuando varios de los jugadores negros de su equipo se fundieron en un abrazo con el técnico francés después de marcar un gol. El malí Cheick Diabate anotó un buen tanto en la victoria del Burdeos en campo del Lens (1-2) y el goleador y varios de sus compañeros se dirigieron a la banda para fundirse en un abrazo con Sagnol y apoyar a su entrenador tras la polémica por racismo que le acompañó en las últimas fechas.
Sagnol no pudo reprimir la emoción y alguna lágrima salió de sus ojos. Fueron semanas duras para el exfutbolista, que a pesar de ver a su Burdeos terecero en la Liga a 4 puntos del líder Olympique de Marsella, se vio envuelto en una polémica por unas declaraciones supuestamente racistas. «Lamento si alguien se sintió conmocionado, humillado o herido por mis comentarios», dijo durante la semana en rueda de prensa Sagnol, que negó haber puesto en duda la inteligencia de los futbolistas africanos.
El ex defensor de la selección francesa explicó que se refería a la «inteligencia táctica» y no a las facultades intelectuales de los jugadores y señaló que sus declaraciones fueron malinterpretadas. «Tengo 37 años y llevo 32 en los vestuarios de fútbol. Y nunca he tenido ningún problema de ningún tipo», aseguró Sagnol, que jugó 58 encuentros con Francia y fue subcampeón mundial en el 2006. Los polémicos comentarios de Sagnol ocurrieron durante una conversaciones con los lectores del diario local Sud-Ouest. «La ventaja de lo que llamaría el típico jugador africano es que no es caro de adquirir, generalmente tiene predisposición ofensiva y es fuerte en el campo. Pero el fútbol no es sólo eso, también es técnica, inteligencia, disciplina», afirmó entonces Sagnol, que comparó luego con las características de los jugadores «nórdicos».
«Los nórdicos son buenos, tienen una buena mentalidad», añadió el entrenador de 37 años, quien consideró que todo equipo necesita una mezcla de todos los tipos de jugadores. Las declaraciones generaron una ola de críticas en Francia y numerosas acusaciones de racismo. Lilian Thuram, excompañero de Sagnol en la selección francesa subcampeona mundial en el 2006, mostró su «sorpresa y decepción» por los comentarios.
Según Thuram, jugador negro nacido en Guadalupe, las declaraciones de Sagnol refuerzan los prejuicios de aquellos que ven a los futbolistas africanos únicamente en términos de fuerza «y le niegan cierta inteligencia». La organización «SOS Racisme», en tanto, consideró «descaradamente racista» la categorización de los jugadores africanos y nórdicos en términos de su físico e inteligencia y pidió una sanción para el entrenador del Burdeos.