El equipo de Simeone defiende su liderato en Suecia frente al colista, que lleva ocho partidos europeos sin encajar en casa
03 nov 2014 . Actualizado a las 20:55 h.El Atlético de Madrid llega a Suecia consciente de que está ante el partido clave para lograr el pase a octavos de una Champions de la que es el actual subcampeón. «Que todos hayan ganado sus partidos en casa habla de la tremenda igualdad que hay en el grupo. Si ganamos, daremos un paso muy importante», explica Gabi, el capitán rojiblanco. Una victoria en el Swedbank Stadion le permitiría llegar con nueve puntos al duelo con Olympiacos, para no tener que jugarse el pase en la jornada final en Turín. «Este partido es vital, como si empezáramos ahora la Champions. Pienso que este partido será muy duro y hay que ganar como sea», explica Saúl Ñíguez.
Simeone prefiere no hacer cuentas y mantener su clásico «partido a partido» porque «está todo tan apretado y tan difícil que este grupo, hasta el último partido, estará muy peleado. No creo que en los próximos partidos se pueda resolver». Pese a que su equipo es líder del grupo A y los suecos últimos el desafío es tremendo para los guerreros del Cholo. El Malmoe, primer club de ese país que juega la Champions en catorce años, lleva tres campañas sin perder en Europa y ocho partidos europeos sin encajar antes su afición.
En octubre del 2011, Marko Devic anotó en el triunfo del Metalist (1-4). Desde entonces, AZ, Drogheda, Hibs, Swansea, Ventspils, Sparta de Praga, Salzburgo y Olympiacos se fueron sin marcar, gracias a lo cual el campeón escandinavo sumó cinco victorias y tres empates. Los griegos, en el único partido de grupo disputado hasta ahora en Suecia, fueron derrotados por 2-0 por un equipo que basa su éxito en la organización y la fuerza. Curiosamente en Liga sí ha caído dos veces, frente al Häcken y al Elfsborg cuando ya era campeón de una Liga que se llevó con seis puntos de ventaja. En todos los duelos ligueros del 2014, quince, marcó al menos un gol. Para poder repetir ese nivel su técnico, Åge Hareide, reclamó a su equipo mayor agresividad y más atrevimiento. «En Madrid estuvimos demasiado lejos de ellos. Tenemos que ser más agresivos», a la vez que confirmó que podrá contar con Robin Olsen, su portero titular que fue uno de los nominados (junto a Helander, Forsberg y Rosenberg) a los premios anules del fútbol sueco
La paciencia atlética
«Los halagos son importantes y hay que tratar de mostrar lo que el rival piensa de nosotros. Queremos hacer un buen partido, sabemos de la necesidad del Malmoe y de las características en su campo: es más intenso, con más juego ofensivo y con gente de altura. Habrá que estar atento y responder de la mejor manera». Simeone, como se cansó de decir ante el Córdoba, no quiere volver a escuchar hablar de premios ni de halagos. Ese día, más allá del triunfo, quedó contento porque su equipo sacó una «virtud importante» ante el Córdoba: ser paciente ante defensas cerradas. «La paciencia del equipo es importante, porque ahora tenemos la posibilidad de jugar bien entre líneas y eso hace avanzar a los laterales.
Tenemos más participación en el juego. Tenemos más continuidad y eso es muy importante cuando un equipo se cierra», reconoció el entrenador de un equipo que en la pasada Champions no perdieron a domicilio en sus seis duelos, ganando en los campos de Oporto, Viena, Milan y Stamford Bridge. Hareide no quiso revelar si jugará con un 4-4-2 o con un 5-3-2, un sistema que ha usado en anteriores ocasiones frente a rivales de mayor nivel y que es el esperado por Simeone. «Ellos son muy fuertes en casa, pero nosotros trabajaremos el partido. Al principio costará, pero al final se abrirán», reconoce Ñíguez. El Cholo ha transmitido a sus jugadores que será difícil encontrar espacios como ya pasó en la ida. En la primera mitad, no hubo goles y en la segunda, tras el inicial de Koke, llegaron otros cuatro. «Desde la pretemporada queremos más posesión y buscamos las combinaciones, que es cuando se pone uno a pensar y se mete en la cabeza de otro. Es saber lo que piensa el otro y entonces maneja el sentido de equipo mucho más rápido. El año pasado se combinaban bien Koke-Costa, Costa-Gabi... Era relación de menos gente de la que necesitamos ahora para potenciar a jugadores como Griezmann, Mandzukic o Raúl García, que son los jugadores de ataque».
Simeone no cuenta con Ansaldi, con una contractura lumbar, y tiene dudas en el centro del campo porque aunque ha recuperado a Tiago parece complicado que esté al nivel físico. Por eso todo apunta a que serán Gabi y Mario, los que aporten el control en el medio. «Espero al Malmoe de la primera parte en el Calderón.es un equipo que se cierra muy bien en defensa y resulta muy peligroso al contragolpe. Se verá un equipo sueco muy agresivo y muy distinto de la segunda parte del Calderón. En la ida nos costó hacer gol en la primera parte, el rival se encerró bien, pero el Atlético fue muy consistente. En su campo el Malmoe es un conjunto muy poderoso, no encaja goles y no podemos subestimar a nadie», dijo Gabi.
Elogios a Griezmann
Simeone quiso confirmar la titularidad de Miguel Ángel Moyá pero no la de Raúl García, si bien adelantó que su inclusión en el equipo no significa la salida de Antoine Griezmann, que está realizando un «gran trabajo» y recibe su recompensa. «Raúl García está bien, Griezmann también y con los dos podemos tener las soluciones ofensivas, pero no tiene que ser uno u otro, pues también pueden jugar juntos».
El francés llegó para sustituir a Diego Costa, cuya marcha «fue precipitada porque tuvo un momento de debilidad en el que él no supo decir que no» según Enrique Cerezo. El presidente explicó que «si pasa ahora mismo no se habría marchado», además de reconocer que el tema económico el traspaso «no ha sido tan bueno. Hemos recibido el 50% de lo que se habló. Fue más un tema de dinero hacia él».
Alineaciones probables
Malmoe: Olsen, Tinnerholm, Helander, Halsti, Johansson, Konate; Eriksson, Adu, Forsberg; Rosenberg y Thelin
Atlético: Moyá, Juanfran, Miranda, Godín, Siqueira, Mario Suárez, Gabi, Koke, Arda, Griezmann o Raúl García y Mandzukic
Árbitro: Mark Clattenburg (Inglés)
Estadio: Swedbank Stadion