El entrenador Manolo García repetirá once y ya calcó ayer la convocatoria de la semana pasada
19 oct 2014 . Actualizado a las 09:17 h.La liga sitúa al Racing en solo ocho días ante los extremos de la Segunda B. Si vapuleó el domingo pasado a un Oviedo que llegaba como líder a Ferrol, ahora visita a un Sporting de Gijón B que cierra la clasificación sin haber ganado todavía un solo partido esta temporada. Con igual cautela e idéntico once quiere afrontar el partido de Mareo (16.30) el entrenador del equipo verde, Manolo García. El triunfo ante el conjunto carbayón matizó la impresión del inicio de liga. El bloque quebradizo de las anteriores jornadas parece ahora más robusto. Algunos datos alimentan el optimismo. Hasta el tanto en la prolongación de Cervero, Mackay llevaba 302 minutos sin recibir un solo gol y el regreso de Pablo Rey multiplicó las opciones en ataque, empezando por las jugadas a balón parado, una de las armas del equipo ferrolano hasta la fecha.
El entrenador repetirá once y ya calcó ayer la convocatoria de la semana pasada, con la baja por lesión de Iosu Villar y los descartes de Jonathan Aspas -ya recuperado de su lesión muscular-, Cristian y Brais Abelenda. El filial sportinguista recibió tres goles en las cinco primeras jornadas y trata ahora de tapar esa vía de agua para salir a flote. «Después de eso se arropó muchísimo. Casi siempre es un equipo muy replegado, con diez jugadores en su campo. Quiere robar y salir rápido. Aunque, al ser un filial, también combina si no conecta el contragolpe. Así que para nosotros será primordial sacar partido de las jugadas a balón parado o conseguir un gol que nos permita abrir la lata, porque en ese caso el rival sí se estira algo más», explica Manolo García.
El Sporting B, colista con solo tres puntos por otros tantos empates, recupera a Guitián en el medio centro, después de varias semanas con una lesión en la rodilla, y al lateral derecho Benito, que deja atrás unas molestias en los isquiotibiales, pero tiene la baja de Touré.
El Racing parte a las nueve menos cuarto de esta mañana en autobús, come en Gijón y queda concentrado antes del partido en un hotel hasta salir hacia el campo.