El barco deja tirado a Amegrove

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

DEPORTES

CEDIDA

La tripulación mejillonera, sin opción en La Concha por la rémora de su trainera

05 sep 2014 . Actualizado a las 06:54 h.

«Fumos os que máis arriscamos. Fumos ao límite. Pero non chegou». El presidente, entrenador y remero de Amegrove, Diego Portela, era ayer la imagen de la desazón. Amargura por saberse con una tripulación con voltaje suficiente para codearse con los mejores en la contrarreloj clasificatoria de la Bandera de La Concha, y verse hundida en la tabla de tiempos, ocupando la decimonovena plaza de los 24 participantes con 20.47.78. Nada menos que a 51 segundos del crono que dio a Koxtape la séptima y última plaza con derecho a luchar con alzar el mayor trofeo soñado por un remero en el banco fijo español.

Portela lo tenía claro. Su transporte los dejó tirados. «Fixemos un primeiro longo bo. Como estaba previsto os que saíron na segunda quenda, os da ACT, colleron menos vento de proa», beneficiándose de ello, y «inda así, en proa entramos entre os mellores; na nosa quenda só nos superou Samertolameu». El problema fue el largo de vuelta dirección a tierra. Ahí «o barco non se movía. Era un problema do barco, non da remada nin da xente. Os meus remeiros fixeron unha regata para sacarse o sombreiro. Arriscamos todo o que puidemos. Mesmo puxera unha sobreproa prana, puidendo entrarnos auga» para rebajar al máximo el peso de la embarcación arousana. Pero ni así. «Quedounos cara de parvos».

La clasificatoria de La Concha sirvió a la tripulación de Amegrove para constatar una sospecha que llevaba rondando la cabeza de Portela y sus pupilos desde hace cosa de un mes. «Pasounos o mesmo en Sanxenxo, e dous días despois no Teresa Herrera. En mar aberto iamos ben en proa, e perdimos con todos en popa» aún desfondándose los remeros.

El problema al fin diagnosticado refleja la inoperancia de la vieja trainera mejillonera, con 11 temporadas ya a cuestas, en aquellas situaciones de mar abierto que no incluyan calma o viento de costado. Una desventaja competitiva con equipos como muchos de los presentes en la Bandera de La Concha que, apunta el entrenador de Amegrove, se pueden permitir pasar de ITVs cambiando directamente de vehículo de competición «cada catro anos».

Sin posibilidad de hacer ya nada al respecto este año, Portela apunta la necesidad de sopesar un sobreesfuerzo la próxima campaña para acometer la compra de una nueva trainera. Mientras, este domingo y el siguiente Amegrove verá a Kaiku (19.38.90), Urdaibai (19.40.14), Hondarribia (19.47.76), Orio (19.49.75), Cabo da Cruz (19.52.76), Portugalete (19.55.69) y Koxtape (19.56.38) competir con la anfitriona Donostiarra por la Bandera de La Concha 2014.