Los dos grandes de la Bundesliga se disputan la Supercopa con la polémica por Reus de fondo
12 ago 2014 . Actualizado a las 17:50 h.El Bayern Múnich y el Borussia Dortmund se disputarán el miércoles la Supercopa, primer título de la temporada en Alemania, en un duelo explosivo entre dos equipos enfrentados por una rivalidad cada vez más tensa. Los dos clubes más importantes del fútbol alemán, en cuyas filas juega la mayoría de estrellas que ganaron el Mundial de Brasil hace un mes, prepararon el partido ante 80.000 espectadores en Dortmund cruzando declaraciones y gestos.
«La rivalidad es grande, pero termina en la cancha», dijo en Múnich el técnico del Bayern, Josep Guardiola, intentando poner freno a la tensión ante el cruce en Dortmund. No lo vieron así los directivos de ambos clubes y Hans-Joachim Watzke, jefe de la junta directiva del Dortmund, rechazó una invitación de la Liga para participar en una comida previa a la Supercopa con sus pares del Bayern ante «la profunda falta de armonía» entre los equipos.
La nueva escalada de tensión se produjo cuando Karl-Heinz Rummenigge, jefe de la junta directiva del Bayern, comentó detalles del contrato de Marco Reus con el Dortmund e hizo temer que el delantero se sumara a Mario Götze (2013) y Robert Lewandowski (2014) al fichar por el equipo bávaro. El director deportivo del Dortmund, Michael Zorc, recomendó a Rummenige «cerrar la boca por una vez» y su par del Bayern, Matthias Sammer, respondió con dureza: «Nadie nos va a mandar callar».
Los dos equipos llevan años dominando en exclusiva el fútbol alemán. El Dortmund ganó la Liga en el 2011 y un doblete de Liga y Copa en el 2012, mientras que el Bayern respondió con un triplete en el 2013 -incluida la Liga de Campeones venciendo en la final al Dortmund- y el doblete la temporada pasada. Ambos se repartieron también las últimas dos Supercopas: el Bayern ganó 2-1 la del 2012 y el Dortmund 4-2 el año pasado.
En lo deportivo, Bayern y Dortmund llegan al partido con la ausencia de varios de los internacionales que disputaron el Mundial y que aún no recuperaron su mejor forma. «Hoy tenemos un entrenamiento y ahí decidiremos quién juega», se limitó a anunciar Guardiola. Pese a las ausencias, el técnico catalán avisó que afronta con máxima seriedad la Supercopa alemana: «Es una final. No es un entrenamiento o un amistoso, es el primer título de la temporada».
También tendrá que renunciar a Franck Ribéry y Rafinha, ambos lesionados. El portero español Pepe Reina, fichado este año como suplente de Manuel Neuer, tampoco viajará aún con el resto del equipo y se quedará en Múnich. En el Dortmund, que tuvo un serio aviso en pretemporada al caer el domingo 4-0 ante el Liverpool, recuperó en el último entrenamiento a Mats Hummels y a Marco Reus, pero su alineación sigue en duda. «Para ambos fue sólo la primera sesión de entrenamientos normal», dijo el técnico Jürgen Klopp.
El regreso de Lewandowski
Todas las miradas en las gradas del Dortmund apuntarán a Lewandowski, que volverá al estadio en el que se consagró vistiendo por primera vez la camiseta del rival. «Pasé cuatro años maravillosos en el Dortmund. Tendré una sensación diferente al volver como visitante a ese estadio», dijo el delantero polaco.
La Supercopa marca el inicio oficial de la temporada en Alemania. El fin de semana se juega la primera ronda de la Copa y el 22 de agosto comienza la Liga, con Bayern y Dortmund como grandes favoritos y las miradas de todo el mundo en el fútbol que arrasó en Brasil 2014.