El capitán del Real Madrid será titular ante el Sevilla con miles de ojos puestos en su actuación
12 ago 2014 . Actualizado a las 18:35 h.Iker Casillas jugará el martes mucho más que una final de la Supercopa de Europa: el veterano portero tendrá miles de ojos puestos en sus guantes en el momento posiblemente más delicado de sus 15 años en el primer equipo del Real Madrid. Casillas será el titular del equipo de Carlo Ancelotti en la final en Cardiff frente al Sevilla, un duelo que tiene signos de punto de inflexión para Casillas. Para abajo o para arriba.
Cualquier error de Casillas cargaría de balas a sus detractores, un grupo cada vez mayor entre los hinchas madridistas, mientras que una buena actuación podría ofrecer garantías a Ancelotti de que es el portero que necesita como titular. En las últimas semanas, la portería del Real Madrid fue un hervidero de rumores tras la llegada del costarricense Keylor Navas, una de las estrellas del Mundial.
Navas, uno de los guardametas más en forma, llegó para competir por la titularidad con Casillas y Diego López. Ningún equipo del mundo cuenta con tres porteros de la calidad del Real Madrid, pero si el debate de la temporada anterior entre Casillas y Diego López fue por momentos violento, la situación con tres parecía insostenible. «Estoy tranquilo con la portería. Casillas jugará la Supercopa y luego ya veremos», dijo Ancelotti durante la gira del Real Madrid en Estados Unidos antes de que se conociera el fichaje de Navas.
Diego López, que cobra cerca de la mitad que Casillas, está a un paso de firmar con el Milan y el entrenador del club italiano, Filippo Inzaghi, ya le dio la bienvenida. Pero ni su salida calmaría la polémica. «¡Fuera Iker!», se escuchó repetidamente durante la presentación de Navas, mientras que los hashtags #CasillasEresUnMiserable y #CasillasVeteDelMadrid fueron trending topic en las últimas horas en España, un reflejo del descontento de un sector de los aficionados con el portero de 33 años.
Broncas con Arbeloa
La imagen de Casillas no se vio precisamente reforzada con su estreno esta pretemporada ante el Manchester United, cuando encajó 3 goles y muchos le señalaron por supuestos errores. un escrutinio que ya sufrió con su mala actuación en el Mundial de Brasil y que se repetirá ante el Sevilla, mucho más tras la marcha de Diego López. Además, las broncas en las redes sociales generadas por su enemistad con Arbeloa enturbian aún más el ambiente alrededor de un mito del madridismo muy cuestionado.
Casillas fue durante muchos años el titular indiscutible del Real Madrid, pero todo cambió con la llegada de José Mourinho al banquillo blanco en 2010. El portugués, descontento con el estado de forma de su portero, le sentó en el banquillo en el 2012 y después fichó a Diego López para suplir a Casillas por una lesión. Las buenas actuaciones de Diego López y las dudas sobre la recuperación de Casillas fueron los motivos que esgrimió Mourinho para no devolver el arco al capitán.
Tras la salida de Mourinho, Ancelotti optó por una decisión salomónica: la Liga para Diego López y la Copa del Rey y la Liga de Campeones para Casillas.
Otra muesca en el palmarés
El Real Madrid ganó las dos competiciones en las que jugó Casillas, pese a que estuvo a punto de caer en la final de la Champions por un error del meta. También capitán de la selección española, Casillas lleva 14 años sin perder una final a partido único con el Real Madrid: de las nueve que jugó, ganó siete y perdió dos, la Supercopa europea ante el Galatasaray en el 2002 y la Intercontinental ante el Boca Juniors de Martín Palermo ese mismo año.
Tras un Mundial muy lejos del estado de forma que le llevó a ser considerado el mejor del mundo, Casillas buscará añadir un nuevo trofeo a su extenso palmarés, en el que se cuentan, entre otros títulos, tres Champions, cinco Ligas, un Mundial y dos Eurocopas. Sin embargo, un error suyo podría ser como echar gasolina a una hoguera.