Denuncian que los trabajadores inmigrantes de Catar 2022 no cobran en un año

M. P. R. LA VOZ / REDACCIÓN

DEPORTES

Nuevas revelaciones añaden presión sobre el país árabe y los derechos de los trabajadores

28 jul 2014 . Actualizado a las 21:33 h.

Los trabajadores inmigrantes de Nepal, Sri Lanka y la India en las obras de cara al Mundial de fútbol 2022 en Catar pueden estar sin cobrar hasta 13 meses. Una nueva denuncia publicada por el diario británico The Guardian vuelve a poner de manifiesto las pésimas condiciones laborales de los obreros contratados para poner a punto el país árabe para la gran cita del fútbol mundial.

The Guardian apunta en concreto al ejemplo del edificio conocido como Torre del Fútbol, en cuyas plantas 38 y 39 tiene su sede el organismo gubernamental de Catar que actúa a modo de comité organizador del Mundial 2022. Una construcción que están poniendo a punto los trabajadores precarios y que cuesta más de 3 millones de euros. «No sabemos cuánto están gastando en el Mundial pero necesitamos nuestro sueldo. Estamos trabajando pero no cobramos. Quien sea: gobierno, empresa, queremos el dinero», cita el diario británico a uno de los trabajadores. En los últimos años, cientos de miles de obreros de los países más pobres del planeta han acudido a la masiva construcción de Catar.

La situación de los trabajadores inmigrantes en Catar, que ha puesto contra las cuerdas la organización del Mundial más aún que por la previsión de las infernales temperaturas a las que se jugarán los partidos y la corrupción en la FIFA para adjudicar la sede, ha empeorado en las últimas semanas después de que la principal contratista en el país árabe, Lee Trading and Contracting, se haya ido a pique. Esto dejó a los obreros sin papeles y sin regularizar sus salarios. La inmensa mayoría malviven en infraviviendas donde se hacinan hasta siete en una misma habitación.

«No he ganado dinero alguno. Si tuviese dinero compraría un billete y me iría a casa», cita el The Guardian a un trabajador nepalí de 35 años. Los trabajadores extranjeros conforman hasta un 94 % de la fuerza laboral de Catar, según cifras del gobierno de Doha que remiten al 2011. Desde entonces se estima que ha crecido. La alarma saltó en septiembre cuando The Guardian denunció que 44 trabajadores nepalíes habían muerto en sólo dos meses debido a ataques de corazón o accidentes en las obras cataríes. Hasta ahora, la FIFA rechazó ser responsable del tema y se remitió siempre a las autoridades qataríes y las firmas constructoras