Capi y Jorge Rodríguez, veteranos con la ilusión de un juvenil

Aleixandre Méndez
Álex Méndez PONTEVEDRA / LA VOZ

DEPORTES

CAPOTILLO

Los dos últimos refuerzos del Pontevedra ponen su experiencia al servicio del equipo

19 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El Pontevedra presentó ayer dos nuevas armas que se suman al arsenal con el que intentará el asalto definitivo al ascenso a Segunda B. El central Borja Calvar Capi, y el delantero Jorge Rodríguez han sido los últimos en sumarse al nuevo proyecto granate, y ambos prometieron poner su dilatada experiencia al servicio del equipo para aspirar a lo máximo.

Lupe Murillo fue de nuevo la encargada de presentar a «lo último o lo penúltimo» en lo que a refuerzos se refiere. La presidenta del Pontevedra se mostró muy satisfecha con el bloque que se está formando, que a su juicio cumple con la premisa marcada de «tener una plantilla de 10» con un «único objetivo: ascender». Y para ello, destacó que tanto Capi como Jorge Rodríguez, procedentes ambos de Segunda B y que superan la treintena, «nos van a dar ese plus de experiencia que faltaba en la plantilla», con lo que entiende que se completa un «proyecto sólido y con garantías de poder lograr el objetivo».

Tras la intervención de la presidenta, el primero en tomar la palabra fue Jorge Rodríguez, al que Murillo calificó como un «hombre de gol». Una cualidad que el punta de Torrelavega, de 32 años, ha demostrado con creces a lo largo de una carrera que ha transcurrido entre Tercera y Segunda B en equipos como el Deportivo B, el Logroñés, la Gimnástica de Torrelavega, el Oviedo o el Racing de Ferrol, equipo en el que ha militado las últimas dos temporadas.

Rodríguez señaló que la negociación había sido «fácil», ya que aseguró que «el proyecto es muy ilusionante». Y aunque asume que sus buenos números realizadores en los últimos años son su mejor aval, y lo que se le pedirá en esta nueva etapa, no prometió una cifra de goles, sino «sacrificio, ilusión y esfuerzo. A partir de ahí, los goles y los resultados llegarán», apuntó.

Por su parte, Capi, de 33 años, llega del Ourense con el cometido de «aportar seguridad en defensa», tal como explicó la presidenta granate, que ensalzó una carrera que incluye equipos de Segunda como el Murcia, el Lorca y el Las Palmas, e incluso una breve experiencia en Primera con el Zaragoza en la etapa del vigués en el filial maño. Por ello, el central admitió que «por trayectoria, ya soy un jugador de los llamados veteranos, y me tocará aportar eso al equipo».

Pero al igual que Jorge Rodríguez, pese a su larga experiencia, la palabra que más repitió Capi fue «ilusión» por poder formar parte del club, demostrando tener clara cuál será la misión del equipo. «Todos los que venimos aquí sabemos que es un reto, porque el Pontevedra no está en la categoría que se merece», señaló.