Iván Sanmartín, delegado en Santiago de la Federación Galega de Atletismo, está «muy satisfecho» con la respuesta de los deportistas compostelanos que cada día aumentan su participación en las carreras populares del CorreSan. El sábado se celebrará la segunda prueba de esta tercera edición y serán casi ochocientos los atletas que estarán en la línea de salida, algo que Sanmartín considera «un gran logro».
Esta carrera de Angrois constará de cinco kilómetros de «gran exigencia», aunque el delegado santiagués entiende que los participantes no tendrán grandes problemas para llegar a la meta. Los técnicos decidieron concentrar las mayores dificultades en el primer tramo del circuito, al que se deberá dar dos vueltas. «Tenemos una subida muy fuerte en los doscientos o trescientos primeros metros, con un desnivel muy grande. Luego viene un kilómetro en el que es todo bajada, pero se hace bien», entiende Sanmartín. Al mismo tiempo, explica que la carrera tiene «un poco de todo», pero comenta que de haberse confeccionado el circuito al revés los deportistas se hubiesen encontrado con una subida de un kilómetro, lo que hubiese incrementado las dificultades.
La prueba de Angrois es «relativamente dura», pero tampoco exige una gran preparación para poder cruzar la meta. Destaca el delegado de atletismo que la cuesta inicial «hay que tomarla con un poco de paciencia, porque el resto de la carrera ya es más cómoda». El ganador, que para Sanmartín será con casi toda seguridad Pedro Nimo, llegará a la meta en unos 16 o 17 minutos.