La selección sólo recibió un resultado peor en toda su trayectoria en las Copas del Mundo
14 jun 2014 . Actualizado a las 02:01 h.La humillación que sufrió España antre Holanda pasará a los anales de la Copa del Mundo. Nunca antes una selección defensora del título se plantó en el debut en el Mundial y se llevó tantos goles. La derrota de los de Del Bosque la convierte en la peor defensora del título en la primera jornada, superando el 6-3 que recibió Alemania de Francia en 1958. La sombra de los fiascos de Italia en el 2010 y de Francia en el 2002 (campeonas que fracasaron de manera rotunda en el siguiente torneo) comienza a planear sobre España. A lo largo de la historia ha habido sonoros e inesperados resultados para los poseedores del trono, como cuando Argentina cayó ante Bélgica en España 82 (0'-1) y Camerún (0-1) en Italia 90, o Francia contra Senegal (0-1) en el comienzo de Corea 2002.
Además, el 1-5 ante Holanda supone la segunda mayor derrota de España en una fase final mundialista desde que sucumbió ante Brasil 6-1 en la Copa del Mundo de 1950, curiosamente también en terreno brasileño. En total, la selección española ha perdido 17 partidos de 56 disputados en fases finales del Mundial desde su debut en Italia 1934.
La mayor goleada se la endosó la anfitriona Brasil en el Mundial de 1950 cuando en la fase semifinal cayó por el ya mencionado 6-1 en Maracaná, aunque España terminó cuarta, su segunda mejor actuación hasta el título logrado hace cuatro años en Sudáfrica. La anterior derrota de España en una fase final mundialista fue también en un partido de debut, en Sudáfrica 2010, ante Suiza (1-0), si bien a partir de ahí la selección de Vicente del Bosque encadenó seis victorias, la última precisamente ante Holanda, para lograr su primera Copa del Mundo.
El único Mundial en el que España no perdió ningún partido fue en el de Corea-Japón 2002, pero resultó eliminada en cuartos de final ante los coreanos en los penaltis (5-3), en un encuentro de triste recuerdo porque el árbitro egipcio El Ghandour anuló un gol claramente legal a Fernando Morientes.
La última vez que la selección nacional había encajado al menos cinco goles ocurrió en un amistoso ante Escocia, 2-6, justo también un 13 de junio de 1963 en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid.