Liga de Campeones: El gran derbi de la historia

La Voz IGNACIO TYLKO | COLPISA

DEPORTES

La evolución de Cristiano y Benzema, en el Real Madrid, y de Arda y Diego Costa en el Atlético, marcan las horas previas

23 may 2014 . Actualizado a las 21:26 h.

Dialéctica, persuasión, engaño, fetichismo, dudas, lesiones, análisis, pronósticos y hasta la placenta de yegua quedan atrás. Conjeturas, chascarrillos y habladurías ceden el paso al duelo más relevante del fútbol español en el ámbito de clubes desde aquella final de la Champions en la que el Real Madrid de Vicente del Bosque avasalló al Valencia de Héctor Cúper en París (3-0). Han pasado 14 años y dos representantes de la LFP vuelven a lucir en el mejor escaparate continental. Los brotes verdes asoman en la maltrecha economía doméstica y numerosos clubes bordean aún la quiebra pero, curiosamente, el fútbol español es hegemónico y monopoliza los títulos de clubes y selección. Es un deporte tan grande y universal precisamente porque no hay quién lo entienda y se aleja de las leyes de la lógica con frecuencia.

En torno a 150 millones de aficionados de unos 200 países seguirán por televisión el mayor desafío del fútbol madrileño, la madre de todos los derbis, la batalla final. Un pulso excelso entre Carlo Ancelotti, experto en estas lides porque afronta su séptima final -ha ganado cuatro, dos como futbolista y dos ya de entrenador-, y el novato Cholo Simeone, debutante como técnico en la Champions pero capaz de conducir a su Atlético a cuatro títulos en dos años y medio y mayor símbolo moderno de los colchoneros. Jamás dos rivales de una misma ciudad han batallado por la orejona.

Y sólo existen cuatro antecedentes de duelos entre compatriotas con el título en juego. Además de la octava del Madrid sellada en el Stade de Francia, el Milan de Ancelotti superó por penaltis a la Juventus en 2003, Cristiano ganó su única Champions con el Manchester United un lustro después al derrotar también en esa lotería al Chelsea, y el Bayern de Múnich despertó al Borussia Dortmund del sueño el curso pasado en Wembley.

Una final de contrastes

Será una final de contrastes. El Atlético ha sido capaz de trasladar a Europa su capacidad para combatir desde la meritocracia a la plutocracia, al duopolio establecido por Barça y Real. Con casi cinco veces menos de presupuesto y de ingresos, los rojiblancos ya pueden presumir de ser los terceros que se cuelan en la final sin pertenecer al 'top ten' de millonarios en el Viejo Continente. Sólo el Oporto y el Mónaco, adversarios en 2004, lograron algo semejante en la última.

El valor del escudo El Real Madrid ansía la 'décima' después de 12 años huérfano del gran título. Aunque asumen el falso papel de víctimas, sus jugadores apelan más a su historia, a su escudo, a la necesidad y a la obligación de vencer, que a su estado de forma. Es el bloque más goleador del torneo, con 37 dianas, de las que Cristiano ha marcado 16, récord de la competición, pero desde su extraordinaria exhibición en feudo bávaro sólo ha ganado uno de sus últimos cuatro partidos de Liga. Cristiano apenas ha jugado ocho minutos en las tres semanas. La tendinitis en la rodilla y el bíceps femoral le merman. «Voy a jugar seguro y quiero ayudar a este equipo a ganar la décima», sentenció CR7 durante la semana. No es el único tocado en un conjunto plagado de grandes individualidades que, sobre todo, lamenta la pérdida por sanción de Xabi Alonso, clave por su calidad, experiencia, ya que sólo el tolosarra, Cristiano, Iker Casillas y Arbeloa han sentido lo que es una final de Champions, y liderazgo.

Armas escondidas

Carletto dice que confía en Illarramendi, su sustituto natural, pero buena parte de la crítica reclama al restablecido Khedira. Pepe está descartado por su rotura en un gemelo y Benzema sufre por la contractura en el aductor. Ancelotti esconde sus armas hasta las últimas sensaciones. Si al final actúa Karim, jugaría con un 4-3-3 en ataque que se convertiría en 4-4-2 al defender porque Bale tendría misiones de tapar. Si el galo no supera la prueba final, es seguro que reforzaría el centro del campo, Isco tendría su oportunidad y Bale y Cristiano serían los puñales. «Desde que llegué, todo ha girado sobre la décima», asume Ancelotti, convencido de que «no hay secretos para un choque equilibrado». «Ganará quien tenga más personalidad y serenidad, y menos miedo», insiste. Habla de «motivación, no de obsesión».

La Liga revitalizante Una inyección de energía y optimismo fortaleció a los rojiblancos tras conquistar la Liga, muy celebrada en Neptuno porque así lo quiso su técnico pese al desgaste. Simeone barrunta una batalla que decisiva en el centro del campo de un duelo con «fricción y ansiedad». Jugó al despiste. Ha probado un un trivote con Mario Suárez, Gabi y Tiago, pero también con dos medios defensivos y Koke y Arda en los costados. Y puede recurrir a Raúl García si el turco se resiente del golpe en la cadera, aunque está dispuesto a infiltrarse y recibió la visita de su médico de confianza en el Fenerbahce. Curaciones milagrosas como la que intentó Diego Costa con el viaje relámpago a Belgrado para pasar consulta con la doctora Kovacevic. Una final justifica cualquier locura. O no, con un Mundial a la vuelta de la esquina. El compacto Atlético se conjura para vengar a los derrotados ante el Bayern en la final del 74. Si los blancos pidieron a Iberia la tripulación de Múnich, Simeone se llevó a sus soldados al retiro segoviano de Los Ángeles de San Rafael. Charlas individuales como en la final de Copa.

Y reminiscencias del doblete del 96 con Radomir Antic al frente. Todo vuelve al origen para que los futbolistas adviertan el valor de esa pretemporada con hasta tres sesiones diarias. Villa recuerda su Champions con el Barça y esa disparo de rosca que noqueó al Manchester United en 2011

La primera de su Atleti del alma, único invicto en esta Champions, sería el mejor homenaje a Luis Aragonés.

Alineaciones probables

Real Madrid: Casillas, Carvajal, Ramos, Varane, Coentrao o Marcelo, Di María, Illarramendi, Modric, Bale, Benzema o Isco y Cristiano

At. Madrid: Courtois, Juanfran, Miranda, Godín, Filipe Luis, Arda, Gabi, Tiago, Koke, Raúl García o Diego Costa y Villa

Árbitro: Björn Kuipers (Holanda)

Estadio: Da Luiz Hora: 20.45