Un Ibaka para el Peixe Galego

Aleixandre Méndez
Álex Méndez PONTEVEDRA / LA VOZ

DEPORTES

El congoleño Cedric Belemene lideró la gran actuación del equipo anfitrión en el Campeonato de España Júnior disputado en Marín

12 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Por tercer año consecutivo, el Marín Peixe Galego se codeó con las canteras ACB en el Campeonato de España júnior, en el que ejerció como anfitrión. El equipo marinense, subcampeón cadete en el 2012 jugando también en casa, ha dejado de ser una sorpresa para convertirse en uno de los grandes en el baloncesto de base. Y buena parte de este éxito radica en el trabajo en el banquillo de Javier Llorente y en una gran labor de captación para contar jugadores becados de nivel como el ucraniano Kiril Podkovyrov y, sobre todo, el congoleño Cedric Belemene.

Precisamente este último cerró el viernes la participación de su equipo en el torneo con unos números de escándalo. En el partido por el séptimo puesto, Cedric anotó 26 puntos y capturó 29 rebotes, lo que sumado a su aportación en otras facetas del juego le otorgó una estratosférica valoración de 63. Una cifra al alcance de muy pocos, pero que solo fue la guinda a una actuación brillantísima en este campeonato, como demuestran otros datos de valoración por encima de los 40 puntos en la fase de grupos o en octavos frente al CAI Zaragoza. Pese a la séptima plaza de su equipo, Cedrick, cuyo primo juega en el Unicaja, fue elegido mvp de un torneo en el que fue también el máximo reboteador.

Nacido en la ciudad congoleña de Pointe-Noire en 1996, se inició en el deporte jugando al fútbol y al voleibol, hasta que un documental sobre la carrera de Serge Ibaka le hizo interesarse por el baloncesto. El cambio de deporte no pudo ser más acertado, y tras participar en un campus en la República Democrática del Congo, el histórico exjugador del OAR Ferrol Anicet Lavodrama le propuso ir al Peixe Galego para intentar cumplir su sueño: ser jugador profesional.

Desde su llegada en el 2010, Javier Llorente ha sido su entrenador tanto en las categorías inferiores como en el equipo sénior, en el que ha logrado hacerse un hueco esta campaña. Con 2 metros justos de estatura, Cedric se ha ido adaptando esta temporada a actuar como alero, después de hacerlo en posiciones interiores en los años precedentes. Y su buena respuesta a este cambio le ha permitido incluso entrar en el quinteto ideal en una jornada de LEB Plata.

Respecto a sus características, Llorente no tiene dudas al destacar «sobre todo la intensidad y la garra que tiene, pelea todo al máximo y está mejorando mucho el tiro exterior», apunta su entrenador. Pero además, añade otra característica vital para triunfar, que no es otra que su «acierto en los partidos importantes». Con esta convicción por seguir mejorando en busca de su sueño, Llorente admite que es difícil intuir hasta dónde puede llegar. «Nunca se sabe. Pero le pone mucho corazón, le gusta el baloncesto y el campeonato ha sido una buena recompensa», afirma.