Iniciarán el proceso para hacer efectivo su adiós ante sus accionistas
28 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.«Para mí y para mis compañeros de directiva la opinión de la afición del Club Deportivo Ourense es sagrada. Hoy han pedido mayoritariamente nuestra dimisión y este consejo dimite», son palabras de Moncho Fernández Morgade, vicepresidente de la entidad de O Couto, a la conclusión del partido de ayer.
La enésima reivindicación de sus asalariados se produjo ayer en el estadio, antes del inicio del partido de Segunda B ante la Cultural Leonesa y, cuando el capitán Daniel Portela subió al palco a pedirles por escrito que se marcharan, el público asistente secundó esa solicitud de manera más que evidente.
Tras la crisis forjada por los impagos a futbolistas, técnicos y demás personal, en algún caso ya camino de los seis meses pendientes, Morgade explicó que el presidente Alejandro Estévez tiene también esa intención y anuncian para las próximas horas detalles sobre «los motivos, razones y argumentos sobre todo lo que está pasando en este club», además de los pasos a seguir, incluida su presencia o no en la reunión prevista con la Agencia Tributaria para mañana, en la cual debían buscar un acuerdo para desbloquear la actividad económica de la sociedad anónima deportiva.
La convocatoria de una junta de accionistas es necesaria para hacer efectivo el adiós de los gestores, que habían llegado con el Ourense al borde de la desaparición en el verano de 2012, pero no han sido capaces de reconducir una situación que además ha derivado en un enfrentamiento declarado e irreversible con la inmensa mayoría de sus empleados.
Morgade estima que la cita asamblearia no se podrá llevar a cabo antes de mediados de junio, pero esgrime que se apartarán si aparece una nueva directiva, a la que le brindan apoyo.