El Ourense busca en la Copa Federación un éxito deportivo y económico
11 feb 2014 . Actualizado a las 13:32 h.El mes de febrero suele ser trascendente en casi todas las competiciones regulares de fútbol, pero el Club Deportivo Ourense pone en juego muchas de las bazas que decidirán su futuro a corto y también a largo plazo.
Por un lado, la falta de liquidez en la caja de O Couto sigue siendo un hándicap que, aún aparcado a la hora de competir, pesa lo suyo. Así tras el cruce de declaraciones de la anterior semana y la dimisión de uno de sus vicepresidentes y el secretario de la entidad, su máximo mandatario, Alejandro Estévez, inició una ronda de contactos que lo llevaron a reunirse con los capitanes del primer equipo, Josu y Yebra.
«Fue una reunión que intentaremos repetir cada semana, para mantener a la plantilla informada de nuestro trabajo y mañana -por hoy- haremos lo mismo con el entrenador, porque queremos remar todos en el mismo sentido», relató el presidente, que también tiene en su agenda una nueva entrevista con Manuel Gómez-Franqueira y «otros empresarios que le pueden brindar una ayuda importante al club para salir del momento delicado en el que se encuentra».
Un nexo de esos deberes económicos y de los deportivos es el partido de vuelta de la Copa Federación, que mañana se jugará en O Couto, contra el Alcalá de Guadaira. El pase a semifinales equivale a 12.000 euros y el acceso a posteriores recompensas, en el caso de seguir adelante. Aunque tanto el cuadro técnico como el plantel sigue enfocando sus metas hacia la pugna por las posiciones de honor en la Segunda B, Luisito ya dejó claro a la vuelta de Sevilla que se volcarán en la batalla copera y ayer mismo insistía en ese propósito: «Vamos a sacar el once más competitivo posible, ellos nos lo pondrán difícil, todavía no han perdido por dos goles esta temporada, pero lo vamos a intentar con todas nuestras fuerzas».
A esa declaración de intenciones, en todo caso, se opone el sentido común que obligará a prolongar la recuperación de Portela, pese a que otro central, Capi, está sancionado para la Copa -también arrastra un problema en el gemelo- y Moisés no pudo completar el entrenamiento de ayer.
Además del esfuerzo copero, el Ourense encara una fase del torneo regular que será determinante para sus esperanzas de mantenerse en la pomada por los puestos de privilegio. El duelo directo en Burgos abre un período de treinta días en el que pasarán por O Couto el desmantelado Noja, la UD Logroñés y el Caudal Deportivo, además de otra salida al feudo del modesto pero combativo Tropezón.
Aguantar el tirón de equipos como el sorprendente Guijuelo, un Avilés que gana peso en la Liga, el irregular Oviedo o el mismo Racing ferrolano equivale a entrar en la fase decisiva del calendario en una situación inmejorable, pese a todos los problemas acarreados por los impagos. Es el momento.