El Obradoiro advierte agravios comparativos en arbitrajes

M.G. Reigosa SANTIAGO / LA VOZ

DEPORTES

XOÁN A. SOLER

El director general del club, José Luis Mateo, recuerda varias decisiones en los partidos ante el Baskonia y el Bilbao para argumentar la queja

07 feb 2014 . Actualizado a las 17:41 h.

Las protestas de la afición de Sar contra los árbitros arreciaron más que nunca en los dos últimos partidos, y eso a pesar de que el Obradoiro saldó con victoria ambos compromisos, frente al Bilbao y el Tenerife.

Los jugadores mantienen la norma de evitar el debate. Sin ir más lejos, Corbacho, que vio ante el conjunto vasco su primera técnica, se explicaba así nada más acabar el choque: ««Simplemente fue frustración y ya está. Esa jugada fue puntual. Me pitaron una falta después de que, a lo mejor, hubiese recibido unas cuantas. La protesta la hice con todo el respeto del mundo. Me pitaron una técnica, merecida, y ya está».

Vasilis Xanthopoulos mantiene la misma norma que seguía en Grecia: nunca habla de los arbitrajes. Tampoco lo hizo en ese encuentro, pese a la polémica técnica que le indicaron, la segunda en toda su trayectoria.

El director general, José Luis Mateo, en cambio, sí entró en materia. Antes de partir hacia Málaga, para asistir a la Copa, accedió a repasar algunas cuestiones de actualidad relacionadas con el Obra. Y se pronunció en una línea parecida a la de los seguidores al referirse a los arbitrajes: «Entiendo y en muchas ocasiones comparto sus quejas. Y lo digo ahora que estamos ganando. El departamento de Arbitraje ACB está trabajando con total dedicación y honestidad, pero seguimos teniendo el mismo problema: no se trata a todos los equipos por igual».

Casuística

Apoya su reflexión con la casuística: «Hay varios ejemplos. En el partido contra el Laboral Kutxa, que se resolvió por una diferencia de dos puntos, teniendo el Rio Natura Monbus un triple para ganar, fuimos sancionados con dos técnicas al banquillo en el último cuarto. Yo no le voy a decir a Juan Carlos García González, que es un excelente árbitro, que no fueran merecidas, pero lo cierto es que protestas similares o incluso mayores de un jugador y entrenador rivales no fueron sancionadas igual. Si con unos te la envainas, si luego no actúas igual con el otro equipo estás siendo injusto».

En el capítulo de las técnicas todavía pintó peor el duelo ante el Bilbao. Mateo se muestra igualmente categórico al analizarlo: «Es un poco lo mismo. Fuimos sancionados con tres faltas técnicas, dos de ellas en el último cuarto. ¿Es justa la técnica a Delas por salirse del campo? Totalmente? Como lo hubiera sido a Bertans justo un minuto antes, por hacer exactamente lo mismo sin que se señalizara nada. Eso es lo que enciende al público, que está allí y entiende de baloncesto. Luego la técnica por supuesta simulación de Xanthopoulos, minutos después de varias caídas de Germán Gabriel, no merece ni comentario. Me pareció gravísima».

El caso Corbacho

También apunta al agravio comparativo al analizar la técnica pitada a Corbacho: «Creo que fue merecida. ¿Dónde está el problema? En que minutos antes Mumbrú protestaba otra señalización tanto o más, y la cosa no terminó igual. Alberto debió controlarse, pero hay que entender su reacción cuando estás viendo que en lugar de poner la atención en el juego sin balón y en qué sucede cuando cortas por la línea de fondo, estamos en ver si el ayudante de Moncho está sentado o de pie. A Corbacho no le pitan igual que a otros jugadores de la selección».