Wawrinka vence a Djokovic y pasa a semifinales del Abierto de Australia por primera vez

Agencias

DEPORTES

JOE CASTRO

El suizo dio la sorpresa y se medirá en semifinales a Tomas Berdych, verdugo de David Ferrer

22 ene 2014 . Actualizado a las 02:34 h.

El tenista suizo Stanislas Wawrinka puso fin este martes al idilio del serbio Novak Djokovic con el Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada, y le eliminó en los cuartos de final tras una batalla de cuatro horas y decidida a cinco sets (2-6, 6-4, 6-2, 3-6, 9-7).

Los dos jugadores revivieron sus dos últimos partidos en grandes. Hace un año, el de Belgrado se llevó el billete a las semifinales en Melbourne Park tras un maratón también de cinco sets, con 12-10 en el definitivo, y casi ocho meses después le quitó al de Lausana el pase a la final del US Open, también en cinco mangas.

Pero, en esta ocasión, la suerte sonrió a Wawrinka, que rompió el idilio que mantenía Djokovic con este torneo, donde acumulaba 25 triunfos seguidos, con el botín de tres títulos consecutivos. Además, puso fin a la racha de 28 triunfos que acumulaba desde que Rafa Nadal le derrotase en Nueva York y, a nivel personal, logró su primer triunfo ante el número dos del mundo después de haber perdido en sus 14 últimos enfrentamientos.

«Es un campeón increíble, nunca se rinde, y estoy muy, muy, muy, muy feliz», resumió Wawrinka. «Había perdido dos veces en cinco sets, pero estaba muy concentrado, me sentía muy bien», añadió el suizo de 28 años, que confesó que en el final del partido sintió «nervios». «Esta noche voy a disfrutar de mi victoria porque creo que es importante. Por eso es que ya el año pasado jugué bien, porque disfruto de mi vida, disfruto del tenis. Cuando gano es importante estar feliz, porque no voy a llegar a semifinales en cada Grand Slam que dispute», dijo el número ocho del mundo. Djokovic, por su parte, aceptó la derrota con caballerosidad. «Claro que estoy desilusionado ahora. Pero mañana es un nuevo día y tengo que aceptar que no puedes ganar todos los partidos que juegas». «Yo di lo mejor, lo di todo. Intenté salir como ganador, batallar hasta el último punto tal y como sucedió el pasado año en la cuarta ronda y en esta misma pista, pero esta vez no fue igual», añadió el serbio.

Y todo después de que las cosas no comenzaran nada bien para Wawrinka, incapaz de crear problemas al resto y que con sus numerosos errores ayudaba a que Djokovic, que llevaba un camino demoledor en el torneo hasta entonces, tomase la delantera en el marcador (2-6). Sin embargo, a partir de ahí, el suizo mejoró ostensiblemente, afianzó su saque y aparecieron los mejores golpes para equilibrar la balanza (6-4).

El de Lausana mantuvo su firmeza en el servicio en el tercero, donde el actual campeón mostró su versión más errática y volvió a ceder su servicio en dos ocasiones para verse al borde del abismo. Pero Djokovic se recuperó en el cuarto y forzó el quinto y definitivo set donde la igualdad se mantuvo entre ambos, que mostraron nervios de acero incluso cuando la lluvia les dio un breve respiro.

Con todo, Wawrinka no dejó escapar en esta ocasión su oportunidad y le robó el servicio a Nole en el decimosexto juego para firmar la sentencia del serbio y volver a buscar su primera final de Grand Slam ante el checo Tomas Berdych, que eliminó antes a David Ferrer.