Espargaró escala al liderato de Moto2 sin Redding en pista

Miguel Sesé PHILLIP ISLAND / COLPISA

DEPORTES

Fue el claro dominador de una carrera en Australia

21 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El terreno estaba allanado para un piloto con la lamentable lesión de Scott Redding, ahora urgido a reaparecer en Japón. Era el momento de Pol Espargaró, y todos los condicionantes estaban a su favor. Carrera al esprint con apenas trece vueltas que le permitía tener una seguridad de la que Pol ha adolecido en la mayoría de las carreras del año: la de saber que sus ruedas aguantarían.

En estas condiciones, y sin el británico, nada que no fuera la victoria dejaría contento al 40. Los hechos corroboraron las sensaciones, y solo Tomas Luthi amenazó la supremacía del piloto de Pons, dominador de principio a fin y nuevo líder de la categoría intermedia. Tras él, quien sí desaprovechó la oportunidad fue Tito Rabat, a quien un error alejó de la cabeza y tuvo que conformarse con la octava plaza.

También supo pescar en río revuelto Jordi Torres, que desde que ganara en Alemania no se había vuelto a subir al cajón. Hasta el domingo, cuando realizó un gran esfuerzo físico y mental demostró que estará preparado para grandes cosas en el 2014, año en el que se hará incluso más conocido. Fue un fin de semana muy atípico y Moto2 no fue la excepción, sino la primera cilindrada en dar la voz de alarma. Mientras todos se vanagloriaban del excelente asfalto del circuito oceánico, en las 600 cc comenzaron a levantar la mano advirtiendo de que los neumáticos, en este caso Dunlop, no servían para nada. Ya que ellos no son MotoGP y no manejan grandes presupuestos, no disponen de dos motos para hacer cambios, por lo que la decisión tuvo que ser obligatoriamente la de una minicarrera que a, tres pruebas de la conclusión del Mundial, obliga a las autoridades a tomar algún tipo de medida. Por menos, Michelin abandonó la Fórmula 1. Sea como fuere, las condiciones eran iguales para todos, y con el depósito medio vacío no había lugar ni para colocarse encima de la moto. Puro talento, puro Pol Espargaró, que si no está Redding en Motegi podría proclamarse campeón de Moto2. «Siento mucho no haber podido conseguirlo con Scott en la pista. Nuestro deporte es peligroso y esto puede ocurrir en cualquier momento, en cualquier vuelta y en cualquier curva. El objetivo para la próxima carrera sigue siendo el mismo», explicó Pol Espargaró. «Vamos a Japón con la intención de ganar, porque creo que tenemos que continuar con la misma actitud que estamos teniendo esta temporada», finalizó.

Espargaró tiene 16 puntos de ventaja sobre el lesionado Scott Redding y 36 respecto a su propio compañero de equipo, Esteve «Tito» Rabat, por lo que le bastaría con sumar nueve puntos, los correspondientes un séptimo puesto para proclamarse matemáticamente campeón del mundo.

«Aún no me lo puedo creer, hemos de acabar el día, sentarnos, analizar lo que ha pasado y disfrutar del momento ya que estoy convencido de que es un gran momento en mi carrera deportiva», dijo Pol Espargaró.

«Siento mucho no haber podido conseguirlo con Scott en pista, nuestro deporte es peligroso»

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