Isaquias Queiroz, discípulo de Suso Morlán, da a Brasil un bronce para la historia

redacción / La Voz

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Para el técnico gallego, quien también se encarga de la preparación de David Cal, es la confirmación de que su labor en la federación brasileña está dando sus frutos

01 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Los resultados no se han hecho esperar. Suso Morlán lleva menos de un año trabajando para la federación brasileña de piragüismo y ya ha conseguido que uno de sus discípulos, Isaquias Queiroz, firme la primera medalla del país Sudamericano en unos mundiales. Lo logró ayer en Duisburgo en la prueba de C-1 1.000 metros, la distancia olímpica. En ella terminó en la tercera posición, con un tiempo de 4.14,154 minutos. Tan solo superado por el alemán Sebastian Brendel, que acabó el kilómetro en 4.10,365; y por el gran Attila Vajda, quien detuvo el tiempo en 4.09,123 y se llevó el oro.

Isaquias Queiroz dispone hoy de una nueva ocasión para subirse al podio, ya que disputa la final del C-1 500 metros. En esta distancia, durante las semifinales, marcó el mejor registro. Por lo que, si no paga el esfuerzo de ayer, todo apunta a que es un firme candidato a colgarse otra presea.

Para el técnico gallego, quien también se encarga de la preparación de David Cal, es la confirmación de que su labor en Brasil está dando sus frutos ya a corto plazo, pese a que el gran objetivo son los Juegos de Río.