El gol germina en la arena

Pablo Gómez Cundíns
Pablo Gómez A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

PACO RODRÍGUEZ

Sabón, primera sede del campus de fútbol playa de Ramiro Amarelle

18 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Aprender a practicar un deporte de la mano de los mejores jugadores del mundo es un lujo solo al alcance de los niños coruñeses. El campus de fútbol playa impulsado por Ramiro Amarelle y en el que también colaboran los internacionales gallegos Nico Alvarado, Kuman Santiso, Roberto Valeiro, Miguel Beiro y Javi Álvarez ya imparte doctrina en el arenal de Sabón, en Arteixo. «Pero el lema del campus es: Diviértete aprendiendo fútbol playa», recalca un Amarelle especialmente preocupado por el bienestar de los pequeños.

Sabón es la primera parada de un recorrido que continúa en Bastiagueiro (del día 22 al 26) y Sada (del 12 al 16 de agosto), pero que también se extiende a las onubenses Punta Umbría, Mazagón y a Barcelona (en colaboración con el Club Natación Barcelona y desarrollado por Miguel Beiro).

«Indudablemente, el fútbol playa es un deporte en expansión, consolidado internacionalmente. Y nosotros llevábamos con la idea de hacer un torneo a nivel nacional desde hace muchísimos años. El campus es solo la fase previa a ese torneo que espero que se ponga en marcha el próximo año», explica el coruñés que lo ha ganado todo en el fútbol playa con la selección española, con el Barcelona y con el Milan.

Pero el actual entrenador del juvenil del Lugo también es un técnico volcado con la base. Su trabajo de cantera con el Racing de Santander, Deportivo y un buen puñado de clubes semiprofesionales y aficionados siempre ha dejado buen poso. «Desde que participé en el primer campus Mauro Silva, o en los que colaboré con Setién, siempre tuve claro que entrenar a los niños me llena», explica echando la vista atrás.

Las chilenas

«Es fascinante comprobar que les puedes ilusionar enseñándoles un deporte nuevo para ellos. Hay que ver cómo hacen las chilenas. Mejor que yo», relata. «Pero nosotros también estamos ilusionados con los pequeños, no hay más que ver a mis compañeros», añade el futbolista gallego.

El trabajo específico técnico se combina con la parte lúdica en la que los niños (de siete a doce años de edad) practican juegos destinados a potenciar psicomotricidad, coordinación, otras disciplinas como rugbi y béisbol, y disputan algún partidillo.

«Aunque son muy pequeños, me sorprende que algunos me conozcan del fútbol playa. Mis compañeros y yo hemos quedado vinculados a este deporte. Me siento identificado con ello. Y nuestra relación va más allá de la competición. Por eso apostamos por esta iniciativa», explica Amarelle, que al instante lamenta: «Es muy difícil encontrar clubes que realmente crean en un proyecto de cantera, pero nosotros queremos intentarlo».

Los éxitos del jugador coruñés a nivel mundial y la consolidación de una disciplina tan dinámica y televisiva como el fútbol playa facilitan la implantación del proyecto Amarelle en toda España. Tres sedes han solicitado el campus para el próximo verano: La Nucía, Benidorm y Almería.

Mientras tanto, Galicia vuelve a ser pionera.