La actitud de Javier Tebas genera controversia: ¿defiende al Deportivo o a Lendoiro?

Fernando Hidalgo Urizar
Fernando Hidalgo A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

02 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Cuando Javier Tebas llegó a la presidencia de la Liga dijo: «Aquí se ha acabado el mamoneo». Un ejercicio de autoridad dialéctica que pretendía hacer ver un cambio en la forma de gestionar el fútbol profesional, es decir, de imponer una disciplina en el cumplimiento de las normas y de ordenar un sector que si por algo se ha caracterizado ha sido por el desorden.

Pero las actuaciones del presidente de la Liga en los últimos días han puesto en entredicho su teoría del mamoneo, por lo menos, en el caso del Deportivo. ¿A quién defiende Tebas en el proceso concursal? ¿Al Deportivo, o a Lendoiro?

Resulta curioso que el dirigente oferte planes de viabilidad que, en realidad, son trajes a medida para Lendoiro, es decir, con una quita reducida que permita al presidente del Deportivo, y cabeza visible de la quiebra del club, eludir la pieza de calificación y tener que hacer frente así a posibles responsabilidades, incluso patrimoniales.

Mientras el club necesita un plan creíble y viable que pueda ser aceptado por los acreedores, la Liga respalda una idea pensada para salvar a uno de los máximos exponentes de la época del «mamoneo» a que se refería el oscense.

Tebas es el asesor principal de Lendoiro en el concurso, en lo que resulta ser una situación atípica, dada su condición de dirigente de la LFP. Igualmente, sorprende el plan de viabilidad que se está presentando a los acreedores dado que parece más una huida hacia adelante de difícil cumplimiento futuro. Y sorprende más aún la apuesta por la persona y no por la institución que está haciendo, algo nada bueno para el Deportivo.