Los blancos sentenciaron la eliminatoria en la primera oportunidad ante un equipo maño que plantó cara
05 jun 2013 . Actualizado a las 12:31 h.El Real Madrid quiso evitar sorpresas en la eliminatoria de semifinales por el título y la sentenció en la primera oportunidad ante un CAI Zaragoza, que le plantó cara y vendió cara su derrota. Empujados por un pabellón lleno a rebosar que no paraba de animar, los zaragozanos dejaron claro desde el primer minuto que estaban dispuestos a luchar hasta el final por jugar el cuarto partido, pero al final no puedo ser y el marcador se fijó en 63-77.
La intensidad de los rojillos en defensa era tremenda y obligaban a los madridistas a emplearse a fondo para conseguir sumar puntos. El problema para el equipo de José Luis Abós estaba en que las diferentes opciones de tiros liberados que conseguían a base de hacer circular el balón muy rápido no eran capaces de transformarlas en anotaciones. El que la sigue la consigue y todo lo que no les había entrado en el primer cuarto empezaron a anotarlo los locales en los segundos diez minutos en los que ofrecieron un auténtico recital de triples, con cinco consecutivos.
La reacción de los blancos llegó de la mano de Tremell Darden. El Real Madrid subió la presión defensiva para ahogar el juego de los rojillos, que vivieron sus peores minutos tras el paso por el vestuario con más de cinco minutos sin anotar. Los blancos esperan ahora rival para la final, que saldrá de la eliminatoria entre el Herbalife y Barcelona Regal.