El Arousa se topará a un Verín rearmado para la lucha final

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

DEPORTES

MARTINA MISER

El equipo ourensano fichó a principios de mes al exdeportivista Iago Beceiro y al vigués André Domínguez

25 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Después de medirse al Choco, el equipo con el que el Arousa comparte la condición de mejor conjunto de la Preferente Sur desde la llegada de Piscis al banquillo de A Lomba once jornadas atrás, el cuadro arlequinado se topará este domingo con un partido trampa. El que lo llevará hasta Verín para medirse al segundo equipo más flojo del campeonato en la segunda vuelta. Un tramo en el que tan solo ha sido capaz de sumar 5 puntos en 15 partidos, pasando a ocupar la cuarta plaza por la cola de la tabla. Pensar en un cómodo compromiso para el Arousa pudiera parecer pues lógico, mas conviene conocer la letra pequeña y los últimos apuntes registrados en el libro de contabilidad ourensano para no equivocar la operación.

El Verín que se topará el Arousa dista mucho de aquel que comenzó la temporada a finales de agosto del 2012, y que completó una aceptable primera vuelta, undécimo clasificado con 27 puntos fruto de siete victorias, media docena de empates y otras tantas derrotas.

Todo se le empezó a torcer en la jornada inaugural del segundo tramo liguero. Entonces Luis Ossorio, Luisito, decidió propinarle un puñetazo en la cara a uno de los asistentes del Verín-Marín tras ver su segunda amarilla. De 9 meses de sanción pasó a recibir 2 años al recurrir el castigo el colegiado agredido ante el Comité de Apelación. El Verín se quedaba así sin su pichichi, autor de 8 goles esta temporada.

Fue este un duro golpe del que el rival del Arousa no se repuso, y que sumó a la pronta lesión de larga duración del lateral Mario, uno de los contados veteranos de un plantel plagado de jóvenes fichados de Primera Autonómica.

La marcha del equipo derivó en un accidentado cambio de técnico, con Iago Lantes, preparador físico y hombre de la casa, sustituyendo a Miguel Sotelo en la jornada 27. Dos más tarde el Verín perdía a su otro referente ofensivo, Camba, en la única victoria ourensana en la segunda vuelta, a costa del hoy ya descendido Ponte Ourense.

Fue ahí cuando la directiva del Verín decidió mover ficha y acudir al mercado, en un último intento por superar al menos al Mondariz, 4 puntos por encima, y dejar cuatro equipos por debajo en la tabla confiando en eludir el efecto arrastre de la Tercera.

Así llegaron hace tres jornadas el extremo coruñés Iago Beceiro y el mediapunta vigués André Domínguez. El primero, internacional con España en categorías inferiores, en la libreta de Lotina para subir al primer plantel del Dépor en su día, e incorporado tras una frustrada experiencia en Ucrania. El segundo, sénior de primer año formado en la cantera del Celta y sin suerte en su breve paso por el Alcalá de Segunda B. Desde sus fichajes el Verín cayó 3-1 con el Portonovo, con gol de Beceiro, y empató sin goles con el Arenteiro y el Mondariz, rivales directos. Mario, además, está de vuelta.