Lejos de derrumbarse tras encajar el gol, fue mejor que su rival tras el descanso
01 abr 2013 . Actualizado a las 19:01 h.Más allá de que el Mallorca se adelantara en el marcador y de que todo se pusiera en contra, el Deportivo comenzó a cosechar los tres puntos de ayer el pasado viernes, cuando cuatro mil aficionados se dieron cita en las gradas de Riazor para transmitir ánimos y confianza a los jugadores. Porque el conjunto que prepara Fernando Vázquez no ganó ayer en Mallorca porque el de Castrofeito hubiera planteado el encuentro mucho mejor que Manzano, ni porque sus jugadores estuvieran mucho más inspirados que los bermellones. El Dépor regresa de Palma con una victoria e ilusiones renovadas porque creyó en sí mismo y, cuando todo estaba perdido, apretó los dientes y dijo: «Sí se puede».
Defensa
Lo que Marchena y Silvio te quitan, Marchena y Silvio te lo devuelven
Si en el gol mallorquín, Marchena le dio al aire y a Silvio le pasó por debajo de las piernas, le golpeó en el pie y desvió la trayectoria del balón, ambos jugadores enmendaron sus errores con dos goles, en el caso del lateral de Play Station y en el del central haciendo recordar los tiempos en los que el Dépor dominaba las jugadas de estrategia.
Mando
Abel Aguilar dio un recital
Jugó el martes con su selección en Venezuela, de ahí viajó a Colombia y tomó un avión rumbo a España, en donde aterrizó el jueves. Pese a los miles de kilómetros, Aguilar dio un recital de mando en el medio del campo.
Inicio
El Mallorca salió más mentalizado
El último y el penúltimo clasificados de la Liga se jugaban mucho en este partido, sin embargo, el conjunto balear pareció mucho más metido en la pelea en los instantes iniciales. Tanto es así que el Deportivo tardó 11 minutos en tener la pelota en su poder.
Reacción
Los blanquiazules no se vinieron abajo tras encajar el gol
Debieron de pensar los deportivistas aquello de «peor, imposible» cuando encajaron el gol a los 18 minutos. Así que con todo perdido, lejos de venirse abajo, fue como si la presión se les esfumara de repente y comenzaron a trabajar más la victoria. El golazo de Silvio solo 8 minutos después reafirmó su convicción y el equipo fue a más.
Los goles
Los dos primeros, en instantes clave
A favor del Deportivo jugó también el hecho de haber marcado a los pocos minutos de encajar el gol y nada más comenzar la segunda parte. Eso atenazó al Mallorca y dio tranquilidad a los coruñeses.
Calma
Los coruñeses evitaron el correcalles y tocaron el balón
Con el marcador en contra, el Mallorca trató de convertir el partido en un ida y vuelta sin sentido. Al principio, el Dépor cayó en la trampa, pero pronto comenzó a tocarla con el objetivo de matar el duelo.
Giovani
Puro veneno en el primer tiempo, fue a menos en la segunda
En la primera parte fue una pesadilla para la zaga blanquiazul, en especial para Silvio, al que rompió en varias ocasiones. Sin embargo, con el paso de los minutos, el futbolista mexicano fue a menos y en el segundo tiempo fue más un quiero y no puedo que un peligro real.