La Federación inglesa investigará al árbitro del Chelsea - Manchester United

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DEPORTES

TOBY MELVILLE

El club londinense se siente perjudicado y asegura que el árbitro insultó de manera racista a dos de sus jugadores

30 oct 2012 . Actualizado a las 13:56 h.

El Chelsea acusó de racismo al árbitro del duelo que perdió el domingo en casa por 3-2 contra el Manchester United, lo que movió a la Federación Inglesa de Fútbol (FA) a iniciar una investigación sobre el asunto.

Mark Clattenburg fue el triste protagonista del partido central de la novena jornada de la Premier League: dejó al Chelsea con nueve hombres al expulsar a Fernando Torres por haberse tirado, concedió el 3-2 definitivo a favor del United cuando debió anularlo por fuera de juego y, según publican varios medios locales, insultó a dos jugadores de los Blues de forma racista.

El árbitro «arruinó» el encuentro, lamentó el entrenador del Chelsea, el italiano Roberto Di Matteo. Su equipo, a pesar de la derrota, continúa líder de la Premier League, aunque con el United y el City pisándole los talones a una unidad. En cambio, el técnico del Manchester United, Alex Ferguson, echó sal en la herida del Chelsea y miró al nuevo encuentro que disputarán el miércoles ambos equipos, esta vez por los octavos de final de la Copa de la Liga.

«Esto va a ser animado. ¡Le deseo mucha suerte al árbitro!», dijo. Clattenburg, que pitó la final de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 entre México y Brasil, no tuvo una tarde de domingo precisamente placentera. Aparte de las decisiones polémicas, sobre él pesan acusaciones de racismo.

El Chelsea, campeón de la Liga de Campeones, acusó al juez de dirigirse con un «lenguaje inapropiado» a dos de sus jugadores. Según coinciden varios medios locales, se trataría de insultos racistas contra el nigeriano John Obi Mikel y Juan Mata. El caso está ahora en manos de la FA: como los árbitros llevan micrófonos, el resto de asistentes y el cuarto árbitro deberán declarar si lo escucharon o no.

Di Matteo, un entrenador de personalidad tranquila, estaba tan molesto con Clattenburg que le siguió por la cabina de vestuarios al final del encuentro. El técnico opinó a pie de campo sobre las supuestas decisiones equivocadas del juez: «A los ojos de todo el mundo está claro que la segunda tarjeta amarilla a Fernando Torres no lo era y que el gol de la victoria fue en fuera de juego». «Es una lástima porque fue un gran partido de fútbol con dos grandes equipos y los árbitros lo arruinaron».

Los Blues estaban en su mejor momento del encuentro cuando se desencadenó la tormenta: después de los tempranos goles de David Luiz en propia meta y del holandés Robin van Persie, el Chelsea recortó antes del descanso gracias a un gran gol de falta de Mata. Ramires igualó a los ocho minutos de comenzar al segunda parte y Stamford Bridge apretaba en busca de tres puntos que lanzasen al Chelsea en la clasificación.

Clattenburg expulsó al lateral serbio Branislav Ivanovic por arrollar a un rival en el minuto 63, en una decisión razonable. Sin embargo, la decisión de mostrar la segunda amarilla a Torres y de dar como válido el 3-2 definitivo con la firma del mexicano Chicharito Hernández fueron más controvertidas. «Tuvimos un poco de suerte. Pero hacía diez años que no ganábamos en Chelsea y en ese tiempo hubo algunas decisiones sorprendentes», señaló Ferguson sobre el primer triunfo de los Diablos Rojos en Stamford Bridge desde abril del 2002. El técnico justificó la tarjeta roja a Torres. «Yo como jugador no me hubiera caído. Se tiró y ya tenía amarilla, así que él mismo tuvo la culpa».

El sindicato arbitral británico Prospect Union mostró su «apoyo total» a Clattenburg que, a raíz de este incidente, no arbitrará ninguno de los partidos de la próxima jornada de la Premier. «Ofrecemos total apoyo a Mark Clattenburg en relación a las alegaciones presentadas contra él. Es importante que se investigue a fondo este incidente en un proceso adecuado y rápido», señaló.