Tres equipos ourensanos están compitiendo ya en la primera categoría del balonmano gallego. El Pabellón debutó con derrota en la Primera Autonómica, aunque compitió bien a domicilio ante el Seis do Nadal (23-21). El equipo que entrena Zarra acusó las bajas de David Sabas y de Fran Varela en la primera línea. Con todo, llegaron al descanso empatados a doce goles y tuvieron una renta de dos tantos en la segunda parte, pero fallaron un penalti y los vigueses se vieron favorecidos por los rechaces.
El Pabellón tendrá su primer partido en casa el sábado en Os Remedios en forma de derbi contra un Viña Costeira que ya está asentado desde hace años en la categoría y que intentará de nuevo meterse entre los ocho primeros, lo que asegurará la permanencia y permitirá luchar por los puestos de ascenso. El equipo ha sufrido las bajas del entrenador-jugador Juan Sotelo y de Alberto, pero ha incorporado del Carballiño a Juan Antonio y José Luis. A las órdenes de Celso Sotelo, el equipo de Ribadavia empezó la nueva temporada con victoria en casa frente al Rasoeiro (29-24).
En la Primera femenina, compite por segundo año consecutivo el Pabellón, que mantiene el grupo del año pasado con una incorporación del equipo juvenil. La cantera pabellonista mueve a unas noventa chicas y el primer equipo se nutre de la base. Sin embargo, la desventaja del equipo sénior es que muchas jugadoras estudian fuera y el único entrenamiento con todas es el viernes. En la primera jornada cayeron por 24-10 con el SAR.