David Ferrer se mete en semifinales del Abierto de Estados Unidos

Ignacio Encabo (DPA) NUEVA YORK

DEPORTES

MIKE SEGAR / REUTERS

Derrotó a Tipsarevic por 6-3, 6-7 (5-7), 2-6, 6-3 y 7-6 (7-4) en un duelo muy físico. Se jugará una plaza en la final con Djokovic

07 sep 2012 . Actualizado a las 21:45 h.

El español David Ferrer peleará el sábado por un puesto en la final del Abierto de tenis de Estados Unidos tras derrotar hoy por 6-3, 6-7 (5-7), 2-6, 6-3 y 7-6 (7-4) en un duelo muy físico al serbio Janko Tipsarevic.

Número cuatro del mundo, Ferrer se medirá en semifinales a Novak Djokovic, defensor del título, y ganador ante el argentino Juan Martín del Potro, campeón del US Open en 2009.

La otra semifinal la disputarán el británico Andy Murray y el checo Tomas Berdych.

«No tengo palabras para describir lo feliz que estoy. Tipsarevic jugó también un gran aprtido y se mereció ganar», dijo Ferrer tras batallar cuatro horas y 31 minutos en la cancha Arthur Ashe, la pista de tenis más grande del mundo.

«Corrí mucho, siempre intento luchar mucho, estar centrado en cada punto. Fue una lotería el último set», agregó un extasiado Ferrer, que alcanzó por cuarta vez las semifinales de un Grand Slam.

El español se impuso al noveno del ranking mundial en un encuentro con duros peloteos y buen tenis desde el fondo de la pista. Y con mucha tensión en el set definitivo.

Ganador de cinco títulos en tres superficies distintas esta temporada, Ferrer está en el momento más dulce de su carrera. Sólo el número uno del mundo, Roger Federer, acumula más trofeos que él esta temporada.

El encuentro transcurrió muy igualado desde el principio y, tal y cómo habían previsto ambos, el físico iba a jugar un papel muy importante en la resolución.

«Es un bulldog», dijo en la víspera el serbio sobre Ferrer. «He oído a comentaristas de televisión describirlo como uno de los tenistas que son capaces de exponer su cuerpo al sufrimiento y al dolor para ganar».

Intercambios largos, de revés, de derecha, con drops y voleas.

Ferrer corría y corría por la pista en busca de pelotas imposibles, pero el serbio no quiso ser menos y se apuntó al maratón. Al final lo pagó caro: solicitó dos veces al médico por molestias en el muslo derecho antes de ceder en el tie break definitivo.

El español se apuntó la primera manga después de ceder su servicio en el primer juego. Entraron con dudas tanto Ferrer como el serbio, que no supo manejar su ventaja.

A Tipsarevic le comenzó a funcionar su primer servicio al comienzo del segundo set y obtuvo los réditos en el tie break.

El cansancio aumentaba pero el nivel no decaía. Tipsarevic, ganador de tres títulos en su carrera, aprovechó las dos únicas bolas de break de que dispuso par apuntarse la tercera manga después de que Ferrer solicitase la asistencia médica.

Después de una cuarta manga con los mismos tintes que la anterior pero con ganador diferente, el partido entró en tensión al comienzo del quinto y definitivo set. Con 2-0 y break arriba para el serbio, ambos pidieron varias revisiones.

«¡Se ha ido, esa bola se ha ido!», gritó el español, consciente de que se le escapaba el partido y su cuarta semifinal de Grand Slam.

No se le terminó escapando. El serbio le dio a Ferrer dos oportunidades de recuperar su saque. «¡Vamos!», gritó Ferrer al romperle y ponerse 4-3 en el tercero. La misma palabra chilló cuando completó el tie break definitivo. Ya estaba en las semifinales.