David Cal disputa la final del C-1 1.000 metros en los Juegos Olímpicos de Londres

Paulo Alonso Lois
PAULO ALONSO LOIS LONDRES / ENVIADO ESPECIAL

DEPORTES

PAULO ALONSO

David Cal aspira a convertirse en este martes, a partir de las 10.48 horas, en el deportista español más laureado de los Juegos y el mejor canoísta de la historia

08 ago 2012 . Actualizado a las 12:05 h.

David Cal participa este martes a partir de las 10.48 horas en la final de piragüismo de C-1 1.000 metros en los Juegos Olímpicos de Londres.

David Cal tiene por delante un camino de mil metros hacia una cumbre todavía virgen. Menos de cuatro minutos después, el reto de este deportista tranquilo, modesto y trabajador es cruzar la meta del lago Dorney con una medalla que lo haga una leyenda a sus 29 años. Porque el metal en C-1 1.000 convertiría a David Cal en el deportista español más laureado de los Juegos Olímpicos y en el canoísta con mejor palmarés olímpico de todos los tiempos en barcos individuales.

La medalla compensaría cuatro años de dedicación espartana centrados en un objetivo: volar hoy sobre el lago Dorney. Cal lo apostó siempre todo a los Juegos, y en mil metros se dejará la vida. Un puñado de detalles lo respaldan en su propósito: ganó en Atenas 2004 -todavía figura como la carrera más rápida de todos los tiempos-, logró la plata en Pekín 2008, donde solo le superó Attila Vajda, el más grande de sus rivales de hoy y confiesa que vive uno de los mejores momentos de su carrera.

David Cal ganó la serie del lunes y fue tercero en la semifinal. Pero aquello solo fue un test para determinar los puestos en la manga suprema de este martes. En todo caso, siempre pendiente de la climatología. Cal Saldrá por la calle siete, resguardada del viento por si sopla aire de costado que puede perjudicar a los zurdos.

El canoísta gallego remontó el lunes tras salidas discretas. «Venía sin ritmo de competición, un poco lento de más. En la semifinal ya salí mejor», explica el palista de las cuatro medallas, las mismas que tienen el ciclista Joan Llaneras y la tenista Arantxa Sánchez Vicario.

Para arrancar a por el podio, Cal desarrolla un ritmo que no tiene ningún otro canoísta en el mundo. Su frecuencia es de 83 paladas por minuto en la salida, de 66 durante la prueba y de 72 en el tramo final. En la historia del piragüismo, solo el alemán Dittmer, al que contribuyó a retirar en Pekín 2008, tiene otras 4 medallas individuales. En este caso, dos oros en C-1 1.000 y C-1 500, una plata en la prueba larga y un bronce en la corta.