Solo tres deportistas gallegas tienen el privilegio hasta el momento de estar residiendo en la Villa Olímpica: la arquera ferrolana Iria Grandal, la jugadora de balonmano Begoña Fernández y la nadadora Bea Gómez. Precisamente la competidora más joven de la expedición gallega en Londres explica lo que está viviendo en esta emblemática zona residencial: «La villa olímpica es impresionante. Es una miniciudad en la que convives con los mejores deportistas de todo el mundo», relata la joven de 17 años, quien agrega: «Es una experiencia que no se vive todos los días y ahora ya sé que me gustaría volver a vivirla».
El día a día a la vista
A cualquier de ellas tres no es complicado encontrárselas en la zona internacional, el punto al que tienen acceso los medios de comunicación y donde se realiza el tradicional izado de banderas. Tampoco es extraño que por ese lugar aparezcan los políticos a fotografiarse con los deportistas. El presidente de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, por ejemplo visitó la semana pasada a la delegación portuguesa que está compitiendo en el Reino Unido. También es el espacio donde los deportistas realizan sus compras, van a la peluquería, se hacen la manicura o pasean un rato.