El equipo azulgrana se exprime para eliminar al equipo italiano con dos goles de penalti de Messi y otro de Iniesta
04 abr 2012 . Actualizado a las 00:59 h.El Barcelona consigue su quinta semifinal de Liga de Campeones consecutiva ante un Milan que le exigió un esfuerzo físico y mental más allá de la claridad del resultado y las ocasiones falladas. Con cierta sensación de fragilidad en defensa y perdonando la sentencia, el equipo de Guardiola se impuso a un Milan que trató de exprimir sus recursos consciente de su inferioridad. Llegó a obtener un 1-1 que le beneficiaba, pero acabó doblegado por la insistencia de Messi y la resolución de Iniesta.
El ritmo endemoniado del primer acto dejaba patente la importancia de un duelo que clasificaba para las semifinales de la Liga de Campeones. Exigido al límite, el Milan se mostró de nuevo incómodo para el Barcelona, que con la posesión de pelota se sentía superior y a sus anchas, pero esa misma sensación de confianza le hacía sufrir sobremanera cuando los italianos superaban la primera línea de presión, conectaban con sus tres delanteros y atacaban los puntos ciegos de la defensa de tres azulgrana. En esa tensión se jugó la primera parte, de la que el Barça salió indemne por los pelos, gracias a dos penaltis transformados por Messi.
El Barcelona juntó a sus jugones en poco espacio y eso semejaba demasiado para el Milan. Cesc, Xavi, iniesta y Messi combinaban en el centro de la ofensiva catalana, mientras Cuenca y Alves abrían el campo como extremos. Ninguno de ellos estuvo especialmente inspirado con el balón en los pies, pero como piezas del tablero contribuyeron a que el Barça se mostrase superior y con sensación de peligro con la pelota. Una maravillosa pared de Cesc con Messi fue la primera clara ocasión de gol, poco después de una galopada de la Pulga. La otra dimensión del ataque azulgrana fue la intensísima presión sobre la deficiente salida de pelota del Milan. Fue así como Messi amenazó con romper el encuentro. Le robó la cartera a Mexes, recorrió 30 metros con la pelota, cedió a Xavi que fue incapaz de resolver en el área y de nuevo Messi forzó el penalti.
Marcó el argentino y todo parecía pintiparado para el Barça y su juego de control. Sin embargo, el Milan no se arrugó. Había creado algún problema cuando saltaba la zanja de la presión del Barça y aparecían, sobre todo, Seedorf e Ibrahimovic. El sueco le dio varios problemas a Piqué, que cedió en un par de duelos con su excompañero. El veteranísimo holandés dosifica sus esfuerzos pero sus detalles de calidad (como el balón cruzado que puso en el remate de Nocerino a los cuatro minutos) siguen siendo rutilantes. Poco después del 1-0, Ibrahimovic giró y desde su atalaya de 1,90 asistió a Nocerino, que a su segundo remate del partido batió a Valdés.
La eliminatoria giraba y el Barça pareció acusar el golpe. Lo metió de nuevo un penalti de Nesta sobre Busquets en un córner, un agarrón tan claro como habitual e innecesario. No titubeó Messi desde los once metros. El Barça acabó en nota alta el primer tiempo, cuando Abbiati sacó sendos disparos de Xavi y de Messi. Encontró el premio el Barça a los 8 minutos de la reanudación, tras la enésima aparición de Messi cuyo disparo cayó muerto en los pies de Iniesta, que congeló el tiempo en el área para definir ante Abbiati. Fue un alivio porque el Milan asustaba ante la fragilidad defensiva del Barça.
Pidió Ibrahimovic penalti de Mascherano en un lío en el área generado por la imposibilidad de la zaga de parar al ariete sueco, y Valdés tuvo trabajo ante las llegadas de Robinho y el sueco. Un par de fueras de juego evitaron mayores sustos a un Barça que seguía dando opciones en la misma medida que Thiago erraba solo ante Abbiati tras otra perla de Messi. Sufrió el Barcelona a pesar del marcador porque perdió al limitado físicamente Xavi y a Piqué lesionado. Keita y Thiago no ayudaron a dormir el partido. El plan del Milan fue añadir a Pato a Robinho e Ibra, pero el brasileño apenas duró unos minutos antes de lesionarse. Resopló el Barça al cerrarse su pase a semifinales, exprimido por un Milan con instinto de supervivencia.
1-0, min 11: Messi de penalti. 1-1, min 33: Nocerino a pase de Ibrahimovic. 2-1, min 41: Messi, de penalti cometido sobre Busquets. 3-1, min 53: Iniesta.
Barcelona: Valdés; Piqué (Adriano, min 74), Mascherano, Puyol; Dani Alves, Cesc Fàbregas (Keita, min 77), Xavi (Thiago, min 62), Busquets; Iniesta, Cuenca, Messi.
Milan: Abbiati; Mexès, Nesta, Abate, Antonini; Seedorf (Aquilani, min 60), Nocerino, Ambrosini, Boateng (Pato, min 69; Maxi López, min 83), Robinho; Ibrahimovic.
Árbitro: Bjorn Kuipers (Holanda). Amonestó a Mexes, Nesta, Mascherano, Robinho, Cuenca, Nocerino y Maxi López.