Teixeira renuncia a la presidencia de la CBF y a la jefatura del comité organizador del Mundial
DEPORTES
El presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ricardo Teixeira, renunció este lunes a su cargo y a la jefatura del Comité Organizador Local (COL) del Mundial del 2014. En una rueda de prensa en la sede de la CBF, su vicepresidente José María Marín leyó una carta de Teixeira en la que éste informa de que se aparta «definitivamente» de la presidencia de ese organismo, puesto que desempeñaba desde hacía 23 años.
La semana pasada, Teixeira, de 64 años, anunció que se apartaba provisionalmente de la presidencia de la CBF por motivos de salud. El empresario comandaba desde 1989 con mano de hierro la Confederación Brasileña de Fútbol y deja el cargo en medio de una lluvia de sospechas de irregularidades y del desgaste de su relación con la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y con el titular de la FIFA, Joseph Blatter.
El nuevo presidente de la CBF y del COL, José María Marin, leyó la carta de Teixeira, en la que afirma que abandona el cargo para cuidar su salud, y que se va «con la sensación del deber cumplido». «Presidir pasiones no es una tarea fácil. Fútbol, en nuestro país, está asociado a dos imágenes: talento y desorganización. Cuando ganamos, destacan el talento. Cuando perdemos, destacan la desorganización. Hice lo que estuvo a mi alcance. Renuncié a mi salud. Fui criticado en las derrotas y subvalorado en las victorias», dice el texto.
La renuncia de Teixeira confirma rumores que circulaban en la prensa desde el año pasado, y ocurre en momentos que el dirigente enfrenta múltiples sospechas de corrupción. La situación de Teixeira se complicó en febrero, después de que el diario Folha de Sao Paulo revelara que el dirigente es investigado por la policía federal brasileña, sospechoso de mantener vínculos económicos con una empresa acusada de cometer irregularidades en la organización del choque amistoso disputado entre Brasil y Portugal en noviembre del 2008, en Brasilia. La empresa acusada es Ailanto Marketing, de propiedad del presidente del Barcelona, Sandro Rosell, quien según la prensa brasileña sería un «íntimo amigo» de Teixeira.
Las acusaciones de irregularidades no son algo nuevo para Teixeira, quien en el 2001 fue blanco de una investigación del Congreso brasileño sobre supuestas irregularidades en el contrato de patrocinio de la selección brasileña firmado entre la CBF y la fábrica estadounidense de material deportivo Nike. Además, el reportero británico Andrew Jenkins, de la BBC, apuntó a Teixeira y a Joao Havelange (expresidente de la FIFA) como beneficiarios de supuestos sobornos pagados por la fallida empresa de marketing deportivo ISL a miembros del comité ejecutivo de la FIFA en la década del 90.
La investigación fue realizada en secreto por la Justicia suiza, pero el año pasado el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, prometió divulgar los documentos del caso. Además de las sospechas de corrupción, Teixeira enfrenta desde el año pasado un fuerte desgaste político en su relación con la FIFA y con el gobierno de Brasil, con quien debería colaborar en la preparación del Mundial de fútbol del 2014.
Los problemas con la FIFA se iniciaron al parecer por la decisión de Teixeira de buscar conquistar la presidencia del ente rector en las elecciones del 2015, en las que Blatter apoya al francés Michel Platini, y que se agravaron tras la promesa de divulgación de los documentos del llamado caso ISL. Por otra parte, la fluida relación que Teixeira solía mantener con el expresidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva pareció desaparecer a partir de enero del 2011, cuando Rousseff asumió el gobierno. Según la prensa local, la mandataria no se ha reunido ni una sóla vez con el ahora expresidente del COL.
En los últimos meses, Teixeira había dado pasos que podrían indicar su decisión de abandonar el escenario para preservarse de las presiones, como la decisión de nombrar a los exfutbolistas Ronaldo y Bebeto para compartir el comando del COL.
No obstante, todas las versiones de renuncia fueron reiteradamente desmentidas hasta ahora, cuando el nuevo comandante de la CBF y del COL leyó ante la prensa la carta de despedida de Teixeira y pidió «respeto» al ahora ex dirigente, alegando que jugó un papel decisivo para que Brasil conquistara el derecho de organizar en el 2014 su segundo Mundial.
Marin, un exgobernador de Sao Paulo quien se desempeñaba hasta ahora como vicepresidente de la CBF, aseguró que la salida de Teixeira cambiará nada en las directrices del fútbol brasileño ni tampoco en el trabajo del COL. «Será la continuidad de una gestión respetada en todo el mundo», afirmó Marin, quien agregó que pidió a todos los miembros de la dirección de la CBF que permanezcan en sus cargos: «Si tienen la confianza de Ricardo Teixeira, tienen también mi confianza».