El Barça domina el planeta fútbol

Joaquín Cavanna BARCELONA / DPA

DEPORTES

Otro año de supremacía: Messi y Guardiola se confirmaron como el cóctel perfecto

26 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Guardiola y Messi. Los dos principales referentes del Barcelona gestaron un nuevo ciclo de ensueño a base de innovaciones tácticas, recursos técnicos inimaginables y abolición de récords de antaño. Cinco títulos sobre seis posibles, un saldo positivo de los siete enfrentamientos contra el Real Madrid y dos exhibiciones de lujo en las finales de la Champions League y el Mundial de Clubes enaltecieron aún más las figuras de estos dos socios del éxito.

«La historia del fútbol es muy grande, pero a este equipo se le recordará como una evolución en el fútbol tradicional», aseguró Andoni Zubizarreta, director deportivo del club azulgrana, después de la goleada por 4-0 frente al Santos en la final de Yokohama. Las cifras confirman la magnitud de la gestión de Guardiola al mando del equipo catalán: ya ganó 13 sobre 16 títulos posibles y, después de tres temporadas, se consagró campeón en cinco de las seis competiciones disputadas este año.

Se trata de un entrenador tan capaz de abandonar su corrección política y mostrarse desafiante en una rueda de prensa previa a una semifinal de Champions contra el Real Madrid como de viajar siete meses después al mismo Santiago Bernabéu y despachar a su máximo rival con un planteo táctico de tres defensores.

«Uno piensa, cuando ha ganado tanto, que se está acercando el fin. Pero también se puede pensar que si estos jugadores lo han ganado todo, ¿por qué no van a volver a hacerlo?», reflexionó el técnico azulgrana.

Con la renovación de la ambición como método, Pep volvió a demostrar que el juego de su equipo no responde a los arrestos de calidad de una generación futbolística única sino que se sustenta en la capacidad de desacomodar cualquier planteo táctico rival.

A lo largo del 2011, Guardiola sacó oro de apuestas como Javier Mascherano en su rol de central, una línea de tres defensores con Dani Alves como extremo ofensivo y una goleada en una final de Mundial de Clubes con una disposición de «3-7-0», destacada precisamente por el entrenador del Santos, Muricy Ramalho. «Con tanta calidad en el centro, la receta es sencilla: analizar al adversario, utilizar bien los espacios, cuidar el balón y hacerlo circular muy rápido», afirmó el padre de la criatura.

Messi, en tanto, consolidó su condición de mejor jugador del mundo. Desequilibrante en todas las finales y asentado como el dueño futbolístico del equipo, el argentino se encamina hacia la obtención de su tercer Balón de Oro consecutivo. El último reconocimiento le llegó de la revista L?Equipe, que lo nombró deportista del año.

«Messi está por encima de todos hoy en día. Es ya indudablemente el quinto grande del fútbol», dijo nada menos que Johan Cruyff, integrante del cuarteto de la fama del imaginario colectivo, junto a Diego Maradona, Pelé y Alfredo Di Stéfano.

18 títulos a los 24 años

Lo cierto es que Messi no hace más que pulverizar marcas de algunas de las citadas leyendas del fútbol mundial. Con 24 años, La Pulga ya suma 18 títulos en su carrera. Maradona había cosechado solo cuatro a su misma edad y Cruyff, ocho.

Messi marcó además en cuatro de las cinco finales disputadas en el 2011: contra el Manchester United, por la Champions; contra el Real Madrid, por la Supercopa de España (anotó en ambos partidos); contra el Porto, en la Supercopa de Europa, y contra el Santos, en el Mundial de Clubes. Por si fuera poco, durante el año se convirtió en el primer jugador del fútbol español en llegar a los 50 goles en una temporada, alcanzó los 200 tantos con el Barcelona y levantó cinco títulos.