La NBA vuelve por Navidad

Luismi Cámara MADRID / COLPISA

DEPORTES

Después de cinco meses de cierre patronal, mañana comienza una temporada con 66 jornadas.

24 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Como en el más típico de los anuncios, la mejor Liga del mundo regresa por Navidad. Y gracias. La NBA comienza después de cinco meses de cierre patronal y con solo 66 jornadas. El acuerdo alcanzado para pactar un convenio que dejara mínimamente satisfechos a las dos partes y permitiera a los propietarios un margen más amplio para cortar las pérdidas de sus equipos ha puesto fin a la incertidumbre y ha dejado paso al juego. Ahora queda en manos de los jugadores dar lustre en apenas cuatro meses a una competición manchada por el lodazal que ha dejado sobre el parqué tanto tiempo de lock out.

Ahora, después de que muchos jugadores decidieran entretenerse en otros países a la espera de que se reanudara la competición, todos vuelven al redil. Todos salvo los que decidieron apostar por la emergente Liga china, que impide salir a cualquier miembro de los equipos que participan hasta que no acabe la temporada.

Y la NBA vuelve con más incertidumbre que nunca. La frenética montaña rusa de traspasos, que incluyen múltiples salidas y entradas de jugadores en apenas unos días, y que ha afectado incluso al asentado Pau Gasol, va a marcar el devenir de muchos equipos en una campaña ya marcada por un calendario infernal que, pese al recorte del número de partidos, obliga a disputar 66 choques en apenas 120 días. En un año olímpico, no hay que olvidar a las selecciones que participarán en los Juegos de Londres -España y Estados Unidos entre ellas- y que cruzan los dedos para que la acumulación de minutos y las lesiones de sus principales jugadores no afecten a sus posibilidades en la cita más importante.

El abanico de candidatos se ha abierto tanto que incluye a franquicias desterradas antes de cualquier lista de favoritos. Como los Clippers que, con el fichaje de Chris Paul y la aportación del veterano Billups y de la estrella emergente Blake Griffin, ha logrado montar una estructura que puede dar grandes resultados al hermano pobre de Los Ángeles si resuelve su problema de escasez en el banquillo.

Los convulsos Lakers, bajo el influjo del estado físico y personal de Kobe Bryant, que no han conseguido reforzarse ni con Chris Paul ni con Howard, y los veteranos Celtics pierden comba frente al big three de Miami -LeBron, Wade y Chris Bosh, los atractivos Bulls de Rose, o los atléticos Thunders de Durant. Los campeones, Dallas Mavericks, han sufrido un proceso de descomposición que hacen pensar que Nowitzki y compañía tendrán muy difícil renovar el sorprendente anillo obtenido la pasada temporada.

Entre los partidos que abren mañana el telón destacan el Miami-Dallas, final de la campaña pasada, Clipper-Lakers y el Boston-Nueva York.