Zlatan Ibrahimovic justificó la próxima publicación de su autobiografía, en la que repasa su vida, señalando que sentía que era la hora de contar su historia. «Era mi turno para decir mi verdad, mi propia historia, precisamente como el título. Según Ibrahimovic, ahora en el Milan, nunca dudó de que era necesario dar su versión. «No se trata solo del Barcelona, eso es solo una décima parte de lo que aparece en el libro».
El jugador sueco rechaza que hayan sido la animadversión o algún motivo oculto lo que lo ha llevado a escribir el libro, sino su deseo de contar su versión. «Si alguien tiene otra cosa que decir o sabe algo que yo no sé, es bienvenido a decirlo, pero yo ya he dicho todo lo que sé en este libro», afirmó. No obstante, admitió que su estancia de un año en el Barça había sido muy distinta a lo que él esperaba, ya que siempre había soñado con jugar en el club blaugrana. «A veces es mejor contentarte con lo que tienes que tener un sueño y cumplirlo y que el sueño casi te mate», explicó.
El delantero del Milan ya había aireado sus desavenencias con Guardiola, a quien se refirió despectivamente con el apelativo de «filósofo» y al que criticó por no saber tratar a los jugadores. Milan y Barça se enfrentarán dentro de dos semanas en partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones, e Ibrahimovic da por seguro que alguna gente se encargará de caldear el ambiente previamente.
Guardiola eludió ayer la polémica. «No tengo nada que decir. Agradecerle todo lo que nos dio esa temporada y desearle toda la suerte del mundo en su futuro».