El balear es el que ha disputado más partidos en los últimos seis años
11 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Sin tiempo para digerir la derrota del domingo ante Murray en Tokio, Rafa Nadal se vio ayer entrenando en Shanghái. Nueva semana, nuevo reto, nuevo país. Así pasa la temporada el tenista mallorquín. «No hay día de descanso. ¡Volvemos a entrenar duro! ¡Hoy en las pistas del Qizhong Tennis Center de Shanghái!», escribió ayer en las redes sociales. Vuelve a acumular en sus piernas más partidos este año que ningún otro jugador. Suma 77, por los 67 de Novak Djokovic, de baja en las últimas semanas por una lesión en la costilla, y los 66 de Nicolás Almagro. Pero, visto con perspectiva, comparando su calendario con los otros tres grandes rivales de los seis últimos años, las diferencias se amplían: ha disputado 18 más que Djokovic, 20 que Federer y 89 que Murray.
Siempre se ha especulado con la posibilidad de que Nadal no llegue a jugar hasta la treintena, como hace Federer. Precoz para ganar Roland Garros con 19 años, su propio tío y entrenador, Toni Nadal, ha admitido esa posibilidad. «Yo sé que hay una fecha de caducidad, pero no sé cuándo llegará. Es normal que si empiezas muy pronto, acabes antes. Hay gente que coge su nivel a los 22 y a los 28 va bajando. Rafael cogió su nivel a los 18 y no sería descabellado pensar que a los 23 o 24 bajase», explicó a La Voz en el 2009.
Nadal, hoy con 25 años, sigue al máximo nivel. Y, a su pesar, no consigue aligerar un calendario que, si todos consideran demasiado cargado, le afecta al mallorquín como a ningún otro, por su acumulación de partidos y por su dependencia del físico.
Nadal juega más porque gana más, pero no solo por eso. Mientras el mallorquín disputa un par de torneos en Asia en octubre, Federer se toma un respiro aduciendo su necesidad de descanso para evitar un torneo obligatorio como el Masters 1.000 de Shanghái. El mallorquín no solo cumple con los imperativos de las pruebas de máxima categoría de la ATP. Este año jugó también en Doha para preparar el Open de Australia, en Barcelona por razones sentimentales, en Montecarlo por prestigio y tradición, en Queen?s como antesala de Wimbledon, y en Tokio. En el fondo, están sus obligaciones comerciales, y también compite con España en la Davis, hasta ahora en este 2011 en las eliminatorias contra Bélgica y frente a Francia.
Cuatro compromisos más
Todavía tiene por delante los Masters 1.000 de Shanghái y París Bercy, el Masters de Londres y la final de la Davis. Así que podría convertir este año en el más cargado de su vida. El mallorquín convive con las lesiones, y controla sus molestias en la rodilla gracias a la terapia con plasma enriquecido con factores de crecimiento. El mundo del tenis se pregunta: ¿hasta cuánto aguantará su físico?