Los coruñeses protagonizan en un cuarto de hora una plácida goleada sobre el Guadalajara
02 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El Dépor más intenso, ambicioso y efectivo de la temporada vapuleó al Guadalajara en trece minutos. El estilo corrió a cargo de Valerón, por más que en las formas (tres goles en un cuarto de hora) imitase el guion que usó el Alcorcón para golearlo hace ocho días. Acaudillados por el mediapunta destrozaron al contragolpe a un rival que tuvo el balón, pero inocente hasta el extremo. El canario, hiperactivo, catalizador de las acciones de ataque de su equipo, zanjó el choque por la vía rápida y, tras su habitual bajón físico, dejó que el equipo se echase a dormir en la segunda parte.
Oltra, que afrontaba la primera prueba de verdad para evaluar su labor, trabajó el aspecto psicológico de sus futbolistas, que salieron con las ideas más claras que nunca para hacer daño al rival. No les importó que el líder de Segunda los apretase desde el principio. Se agruparon con eficacia, defendieron sin dudas y no les tembló el pulso en ataque, donde siempre acertaron.
Los coruñeses abrieron el partido a los siete minutos con un disparo ajustado, pero raso y desde 30 metros, de Guardado que Saizar se tragó. A partir de entonces, al Dépor le bastó con sacar partido de dos mortales contragolpes y de la inspiración de su mejor futbolista. Ni se apropió del balón ni dominó el ritmo del choque, pero sí se aprovechó de la inocencia de su rival, un recién ascendido que dejó cabalgar a los blanquiazules hasta la frontal de su área, donde Valerón no falla nunca.
A buen seguro que su asistencia en el segundo gol dará la vuelta por las televisiones. Contragolpeó con el beneplácito alcarreño, picó el balón sobre los centrales y Álex Bergantiños, ayer el primer defensor y el último rematador, fusiló sin dejarlo caer. El estadio se derrumbó para cantar gol.
Aún quedaba el tercero. Se deshizo de dos rivales para entrar en el área e hizo el pase de la muerte, que otra vez Álex empujó a la red. Se premió así la efectividad del Dépor, que en quince minutos solo había disparado una vez más a portería, y se castigó sin miramientos al Guadalajara.
Quizá otro gallo le hubiera cantado si con 1-0 Harper hubiera acertado en su cabezazo a la cruceta o si, ya con 3-0, el árbitro le hubiera pitado un claro penalti por mano de Zé Castro o si, aún antes del descanso, se hubiera percatado de la agresión de Aythami a un contrario en un saque de córner. Pero el Dépor ya guardaba los tres puntos en el bolsillo. La segunda parte sobró. El Guadalajara claudicó en su propia incapacidad y solo Salomão, en una contra al final, cerró el marcador. La mancha de Alcorcón quedó borrada.
Ficha técnica
Goles: 1-0; min 7: Guardado. 2-0, min 10: Álex Bergantiños. 3-0, min 15: Álex Bergantiños. 4-0, min 80: Salomão.
Árbitro: Melero López (Comité andaluz). Amonestó a Seoane, Guardado, Aníbal, Moreno y Jony.
Incidencias: Séptima jornada de Liga. Estadio de Riazor. Unos 25.000 espectadores en las gradas.
Aranzubia; Seoane, Zé Castro (Morel, min 63), Aythami, Ayoze; Á. Bergantiños, J. Vázquez; Salomão, Valerón, Guardado (Rochela, min 76); y Lassad (Bodipo, min 76).
Saizar; Antonio Moreno, Jorge, David Fernández, Barral; Iván Moreno (Jony, min 46), Soria (Rodri, min 46), Jonan, Ernesto; Aníbal y Harper (Ander Gago, min 46).