París premia la constancia de Cadel Evans

Efe

DEPORTES

El australiano se corona en los Campos Elíseos con su primer gran título a sus 34 años.

24 jul 2011 . Actualizado a las 21:18 h.

El australiano Cadel Evans (BMC) ganó el Tour de Francia, tras la disputa de la última de las 21 etapas de que constó la prueba y en la que se impuso al esprint el británico Mark Cavendish (HTC).

La última etapa discurrió entre Créteil y la capital francesa, con un recorrido de 95 kilómetros, que sirvieron para rendir homenaje al corredor oceánico, quien el sábado, en la contrarreloj de Grenoble, dejó sentenciada la carrera.

En la 21ª jornada hubo la tradicional fuga de seis corredores que, en algunos momentos, llegaron a tener alrededor de treinta segundos sobre el grupo. El portugués Sergio Paulinho (Radio Shack), el esloveno Kristian Koren (Liquigas), los franceses Christophe Riblon (AG2R) y Jeremy Roy (Française des Jeux), el danés Lars Bak (HTC) y el británico Ben Swift (Sky) fueron los ciclistas que quisieron tener su pequeño momento de gloria.

A falta de unos seis kilómetros los equipos de los velocistas aceleraron el paso y acabaron con las escasas esperanzas de los fugados de pelear por el triunfo. Se consumó el trámite de la jornada final, que sirvió para coronar en París a un veterano de 34 años, un Evans que se adjudica después de una carrera marcada por la constancia su primera gran vuelta por etapas.

El español Alberto Contador, tres veces campeón y que defendía el título, fue quinto, seguido de su compatriota Samuel Sánchez. Los hermanos luxemburgueses Andy y Frank Schleck, segundo y tercero, respectivamente, completaron el podio. Discutido por su forma de correr, por su escasa aportación al espectáculo, Evans ha sido coherente con su estilo. Jugó sus bazas, aguantó hasta la contrarreloj de Grenoble e impuso su potencial ante un Andy Schleck que se estanca en sus objeto en un año que ha coincidido con la cotización a la baja de Contador, su rival natural.

No se rinde el pequeño de los Schleck, quien ya anuncia que volverá el próximo año «para ganar», pero tendrá que luchar primero con la sensación de haber perdido una ocasión de oro y con la obligación de mejorar, y mucho, en contrarreloj. Un aspirante a ganar el Tour no debe perder 2.38 en 42 kilómetros.

Se quedaron fuera del podio el francés Thomas Voeckler (Europcar), cuarto, que vistió de amarillo 10 días y Contador, el gran derrotado del Tour, incapaz de ampliar a siete sus triunfos consecutivos en las pruebas grandes por etapas. Desde el 2006, con triunfo de Pereiro tras la descalificación de Floyd Landis por dopaje, el primer escalón del podio era español. Contador lo conquistó en el 2007, 2009 y el 2010 y Carlos Sastre en el 2008.

El madrileño dio la arena. Sea por las molestias en su rodilla derecha a causa de las caídas, por el cansancio del Giro de Italia o las influencias de un año difícil en lo personal con su caso de presunto dopaje pendiente de la decisión del Tribunal de arbitraje (TAS), la imagen de Contador descolgado en los puertos, alejado de la pelea entre los favoritos, ha resultado extraña por inhabitual.