Lo de Andrés Guardado en la plaza de Pontevedra fue un visto y no visto. Tras una breve reunión y un regate a la prensa, tomó rumbo a Vilalba en el mismo coche que el director deportivo, Ernesto Bello. Justo el día en que el mexicano se incorporó a la concentración del Dépor se confirmó el fichaje de Diego Capel por el Sporting de Lisboa, que tras la incorporación del exsevillista descarta al deportivista, según el diario A Bola.
El club había citado a Adrián, Guardado y Rubén Pérez para las seis de la tarde de ayer en la plaza de Pontevedra. El primero, a esas horas, estaba en el Vicente Calderón, disfrutando de sus primeros minutos como colchonero. Cedido por el Atlético, cuando ambos clubes tenían una relación cordial, llegó Rubén por dos temporadas, la pasada y la actual. El mediocentro no se pasó por la plaza de Pontevedra, y fue recogido por el coche de Bello y Guardado para ir juntos a Vilalba.
Así que el único que acudió a la sede del club fue Guardado. Llegó a la hora fijada, y al poco bajó de la oficina el director deportivo. Arriba se reunió, al parecer, con Pablo Pereiro, pues el presidente no estaba.
Un corto encuentro
El encuentro duró poco más de un cuarto de hora. Bello lo esperaba abajo para irse a Vilalba y presentárselo al nuevo técnico, Oltra. El Deportivo impidió a Guardado hablar con la prensa: «Me puso silencio el club. Hasta que no haya otra cosa [se supone que una oferta], a respetar un poco [la orden de la entidad]». Eso fue lo único que dijo el centrocampista mientras se metía en el automóvil.
Como se anunció ayer, sus dos agentes tienen previsto llegar a A Coruña a lo largo del fin de semana, probablemente el viernes, para negociar con el Deportivo, que está dispuesto a venderlo si llega una buena proposición económica.
Ayer se cayó la oferta económica más importante, al menos de las que hayan trascendido, recibida en el club por Guardado. El Sporting de Lisboa ofreció semanas atrás 4 millones de euros y el Deportivo los rechazó, según publicó la prensa portuguesa. El conjunto lisboeta buscaba un mediocampista de banda izquierda. Ya lo tiene: es Diego Capel. Por él pagará 3,5 millones de euros fijos más unos variables de hasta un millón de euros, que dependerán de los años en los que se meta en Champions el Sporting. El club portugués tiene pensando contratar a uno o dos jugadores más, pero no para ese puesto, según A Bola.