El secretario de Estado para el Deporte, Albert Soler, tuvo ayer doble protagonismo en los medios. Los diarios As y Público ofrecían ayer entrevistas con el elegido para relevar a Jaime Lissavetzky al frente del Consejo Superior de Deportes. Los titulares elegidos por ambos periódicos eran clarificadores: «El Estado no va a poner ni un euro en el fútbol», fue el elegido por As, mientras que Público abrió con la afirmación que «El Estado no va a pagar la mala gestión de los clubes».
En el diario deportivo, Soler hablaba de acelerar plazos: «Me parece muy bien que la LFP plantee un modelo de control, pero quizá llegue un poco tarde. Si esto se hubiera hecho cuando se empezaron a detectar los problemas, hace unas cuantas temporadas, no estaríamos en esta situación».
Además de mostrarse tajante en cuanto a la supresión de los partidos en abierto -«va a ser que no»-, el presidente del CSD analiza la aplicación de la Ley Concursal en el ámbito deportivo: «No vale aprovecharse de ella para gastar más y jugar así con ventaja, sabiendo que no se va a descender». Una idea similar a la que expone Soler en Público, donde tacha de «perverso» el uso que algunos clubes han hecho de esta ley. «Hay una injusticia deportiva enorme», insiste, al tiempo que asegura que pronto se introducirán reformas para que la situación no siga igual.
También reflexiona en este periódico sobre las posibles ayudas del Gobierno y destaca que «estamos aún en el segundo plan de saneamiento del fútbol español, devolviendo la deuda. No tiene sentido que la mala gestión de unos la tengan que pagar todos».
El dirigente del CSD descarta en As que el modelo de sociedades anónimas esté agotado: «El problema no es el modelo, sino la gestión del mismo. La mayor parte de las SAD han estado mal gestionadas». En cuanto a la situación de impagos a los jugadores, también se muestra claro al subrayar que «es lógico que si los futbolistas no paguen se planteen la huelga, no son distintos que cualquier otro español».
Denuncias de los jugadores
Una frase que enlaza con la información aparecida ayer en otro rotativo (Marca), en la que se exponía que «La AFE asume sueldos más bajos, pero garantizados» y que los jugadores «aceptarían un hipotético tope salarial». El presidente de la Asociación de Futbolistas, Luis Rubiales, apunta que «este año habrá récord de denuncias».