Durante toda la semana el vestuario blanquiazul ha reconocido que en caso de no ganar al conjunto vasco, la obtención de un billete para Europa sería algo prácticamente imposible.
01 may 2011 . Actualizado a las 17:30 h.El RCD Espanyol afronta mañana un partido que determinará si sigue vivo en su pelea por los puestos europeos de la tabla, ante un rival directo como el Athletic de Bilbao y en lunes, una fecha que no ha sentado muy bien al club catalán, ya que teme que la asistencia de público en un choque clave sea reducida.
Durante toda la semana el vestuario blanquiazul ha reconocido que en caso de no ganar al conjunto vasco, la obtención de un billete para Europa sería algo prácticamente imposible. El Espanyol ha sumado dos puntos de los últimos quince posibles y no tiene más margen de error a falta de cinco jornadas para que finalice la temporada.
Mauricio Pochettino, entrenador blanquiazul, sigue sin poder contar con el mediocentro Aldo Duscher, que sufre una pubalgia, y tiene la duda del portero suplente Cristian Álvarez por un esguince cervical. El meta del filial Dinu es la principal novedad en la convocatoria. También entra el canterano David López.
Tampoco estará el defensa Javi López, sancionado por acumulación de amarillas. El andaluz había sido reubicado del lateral al doble pivote y ahora Pochettino se verá obligado a reconstruir otra vez el equipo. En este sentido, la medular del Espanyol podría estar formada por Javi Márquez y Joan Verdú, de corte más ofensivo.
En defensa seguirían los habituales Galán, Raúl Rodríguez, Amat y Chica. En ataque, Luis García estaría en la banda derecha, Callejón en la izquierda, Iván Alonso de enganche, para ayudar también a los pivotes en la recuperación, y Osvaldo en punta. El delantero centro perico ya suma diez goles, su mejor marca como profesional.
Por su parte, e Athletic Club viaja con la pretensión de dejar casi atada en Cornellà-El Prat su clasificación europea para la próxima temporada, que tendría a tiro de una victoria en los cuatro últimos partidos del campeonato liguero de ganar mañana en el campo espanyolista.
El equipo bilbaíno se medirá al Espanyol con la tranquilidad de los 6 puntos de ventaja que mantiene sobre los Mauricio Pochettino, el último de los cuatro equipos que luchan por los tres billetes de la Liga Europa que también pretenden Sevilla y Atlético de Madrid.
La victoria de la primera vuelta en San Mamés y lo poco que queda de competición le hacen también más que válido un empate al conjunto rojiblanco, que, no obstante, aspira a más para terminar lo más arriba posible en la clasificación y evitarse previas en el segundo torneo continental.
Por otro lado, el Athletic, que mañana estrena su segunda nueva equipación roja, verde y blanca, recupera a tres jugadores que fueron baja en la última jornada ante la Real Sociedad por sanción, Iraizoz, Castillo e Iturraspe. Y además Joaquín Caparrós puede seguir contando con Muniain, que continúa con la suspensión cautelar de su sanción por acumulación de tarjetas.
Por contra, pierde, por el mismo motivo, a Mikel San José, lo que no le impedirá al técnico sevillano mantener su bloque habitual, aún con sus delanteros habituales, Toquero y Llorente, renqueantes por sendas molestias musculares.
Junto a ellos, Caparrós completará un once casi seguro con Castillo de lateral y Amorebieta regresando a su posición natural de central. Quizás la única duda que podía tener el de Utrera, y que habrá despejado en la sesión a puerta cerrada de esta mañana en San Mamés, es si mantiene a dos jugadores específicos de banda en el centro del campo, o si introduce a Gurpegui para ayudar a Orbaiz y Javi Martínez en labores de contención.
De todos modos, la incidencia de David López en el 2-1 ante la Real de la última jornada hace pensar que el riojano pueda seguir en el once inicial.