Guardado ha llegado de México con las pilas recargadas. Ayer animó a sus compañeros a «sacar pecho» el domingo contra el Mallorca.
«Al vestuario lo noto bien, con la tranquilidad de estar trabajando como se suele hacer, con la mentalidad de que el siguiente partido es importantísimo, que no nos podemos dejar más puntos en casa y vengo a unirme a ese trabajo porque después de la derrota con el Levante tenemos que sacar pecho», aseguró el mexicano, que dio un ejemplo de compromiso al ejercitarse en Abegondo recién aterrizado. El miércoles partió de San Diego (California) a las tres de la tarde (hora española) rumbo a Chicago; de ahí a Madrid, y de Barajas a A Coruña, adonde llegó a las 10.30 horas de ayer. «Es un viaje largo, cambias de horario en poco tiempo, pero no es la primera vez que lo hago y no pasa nada», restó importancia.
Con México disputó un total de 109 minutos entre dos partidos: «Jugué lo que el seleccionador decidió, teniendo en cuenta las recomendaciones del Dépor». Ha vuelto contento, y no solo por haber marcado un gol. «Estoy muy feliz porque más que un gol significó cerrar mi proceso de lesiones, de cosas que habían pasado, de tantas dudas. Estoy de regreso otra vez y vengo muy reforzado anímicamente».
Ya no quiere parar. «Quiero jugar ya los noventa minutos y ayudar al equipo porque tenemos que salir adelante sí o sí», avanzó el mediocampista, que desde que reapareció solo ha jugado un partido completo con el Dépor, y fue por obligación (contra la Real Lotina agotó los cambios por las lesiones).
«Quiero jugar ya los 90 minutos y ayudar al equipo ahora porque tenemos que salir adelante sí o sí»
Andrés Guardado
Jugador del Deportivo