El presidente del Inter de Milán, Massimo Moratti, fue suspendido tres meses por la Comisión Disciplinaria de la Liga Profesional Italiana de Fútbol por haber negociado con su homólogo del Génova, Enrico Preziosi, el traspaso de Diego Milito y Thiago Motta cuando este estaba suspendido.
La Comisión condenó, además, a Moratti al pago de una multa de 45.000 euros, mientras Preziosi fue suspendido durante seis meses y deberá pagar 90.000 euros, según informaron ayer los medios de comunicación italianos. Tras conocer la decisión de la Comisión, Moratti aseguró que se trata de «la coronación de un comportamiento y de una voluntad».
«No me siento culpable. No han tenido en cuenta nuestra defensa y nuestras justificaciones. Tengo mucho respeto por los jueces, pero menos respeto por la Federación. Tenía razón Mourinho cuando dijo que este año [cuando el Inter ganó la Liga, la Copa y la Champions] nos la harían pagar», agregó.