«Seguir de líder es un sueño, continuaré luchando hasta el final», dice el corredor del Caisse d'Epargne
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David Arroyo (Caisse d'Epargne), maglia rosa del Giro de Italia, aseguró que «seguir de líder es un sueño» y prometió «continuar luchando hasta el final». El talaverano reconoció que la de ayer «fue una etapa muy dura» para él. «Las diferencias que me han sacado los favoritos como Cadel Evans, Alexander Vinokourov y Vincenzo Nibali son razonables considerando la dureza del puerto. Y Carlos Sastre, que era el que estaba más cerca en la general, me ha recortado un minuto», apunto.
Indicó que «Basso se mostró intratable, hizo una subida extraordinaria» y destacando, sobre todo, las diferencias que el jefe de filas del Liquigas logró en meta con respecto a Evans, Vinokourov y Scarponi, «lo que refleja lo fuerte que se ha mostrado en la ascensión»
Después del día de descanso que afrontarán los corredores en la jornada de hoy, Arroyo tendrá que defender el rosa en la cronoescalada al alto de Plan de Corones de 12,9 kilómetros.
Sastre, satisfecho
Por su parte, Sastre se mostró «contento de seguir en la pomada». «Para mí ha sido un día muy importante y que tenía marcado, porque quizá yo no podía ganar en esta subida el Giro de Italia, pero sí que lo podía perder después de arrastrar problemas durante toda la carrera», comentó. «Fue una etapa francamente dura», señaló. «Los puertos eran cortos pero de altos porcentajes y el equipo Liquigas ha puesto en ellos un ritmo muy duro. Pienso que Ivan Basso pudo aprovechar la oportunidad que le dio su equipo gracias a esa buena condición física que tiene en este momento, para ganar la etapa y para ponerse un poquito más adelante en la general», señaló. Sastre confesó que en el Zoncolan él puso su ritmo «hasta los últimos cinco kilómetros», en los que aceleró para intentar perder el menor tiempo posible.