La selección de Del Bosque aplana a su rival y suma un contundente triunfo ante su bestia negra.
04 mar 2010 . Actualizado a las 12:55 h.España sigue imparable. Su fama le precede y aplana a los rivales sin necesidad siquiera de desplegar su fútbol de altos vuelos. La selección de Del Bosque ajustó cuentas pasadas ante Francia, minimizó a los galos y levantó olés y ampollas a partes iguales en Saint Denis, dolido y admirado por la victoria española.
Y eso que no hubo lujo en el juego de la selección. Bastaron contadas combinaciones de la línea de creación de España para desnudar a la Francia que tuvo que recurrir a un gol ilegal en la prórroga de la repesca para entrar en el Mundial. España solventó el choque con dos goles de Villa y Sergio Ramos en la primera parte, y dormitó en la segunda en medio del carrusel de cambios, la impotencia gala y la búsqueda del contraataque fugaz persiguiendo a Torres.
España dio la sensación de tener todo bajo control, a pesar de varias pérdidas peligrosas de Busquets y Xabi Alonso en zona peligrosa. En la creación, los mediocentros españoles fueron de lo más flojo del partido. Aún así, el centrocampista del Barça tuvo en su cabeza la primera ocasión clara de gol, en un remate tras una falta botada desde la derecha. Antes, una triangulación entre Alonso, Cesc e Iniesta ofreció la primera gota de calidad del partido.
La defensa adelantada de Francia creó algún problema en la fluidez de los iniesta, Silva y Cesc, pero la selección del cuestionadísimo Domenech no llegó a Casillas hasta el minuto 47. Y ese espacio que la retaguardia dejaba a sus espaldas nació el primer gol. Silva no controló un pase entre líneas de Xavi, pero en el intento engañó a Escudé, que no pudo frenar a Villa. El asturiano no perdonó ante Lloris.
El gol dio aplomo a España, que pasó a dominar el juego e impuso su ritmo. Sin necesidad de generar un gran torrente de ocasiones ni combinaciones de vértigo, la figura de la selección se hizo gigante para los franceses. Más cuando un contragolpe liderado por Iniesta y que terminó en un remate rechazado de Villa, acabó en Sergio Ramos. El lateral, pisando área, recortó hacia su izquierda y su tiro, desviado por Evra, engañó a Lloris para convertirse en el segundo.
Tras el descanso, Anelka obligó a la primera parada de Casillas. Los cambios se sucedieron, con España introduciendo a Torres, Xavi y Navas desde el inicio. España se aculó y buscó la rapidez de los puntas, a los que se uniría después Güiza. Malouda remató de cabeza al palo un centro desde la derecha en el único susto que alteró el pulso de España. Torres una contra lanzada por Ramos, y Navas, casi sobre el pitido final, cruzó en exceso solo ante el portero, pero España se mostró más tímida, cómoda en su superioridad, por fin superior a los verdugos del último Mundial y de la Eurocopa de Portugal.
Ficha técnica:
0 - Francia: Lloris; Sagna, Ciani, Escudé, Evra; Toulalan, Lassana Diarra; Ribéry (Malouda, m.74), Gourcuff, Henry (Govou, m.65); Anelka (Cissé, m.77)
2 - España: Casillas; Sergio Ramos, Puyol (Albiol, m.46), Piqué, Arbeloa; Xabi Alonso (Senna, m.64), Busquets; Silva (Güiza, m.80), Cesc (Xavi, m.46), Iniesta (Navas, m.64); Villa (Torres, m.46)
Goles: 0-1, m.21: Villa; 0-2, m.46: Sergio Ramos
Árbitro: Craig Thomson (ECO), amonestó a Sergio Ramos.
Incidencias: Partido amistoso de preparación para el Mundial de Sudáfrica disputado en el Estadio de Francia de Saint-Denis ante unos 80.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas del terremoto de Chile y del temporal en Francia.