Cree que detrás de las críticas que suscitó la celebración de una copa del mundo en África y de las dudas posteriores se esconde un cierto racismo cultural europeo
02 mar 2010 . Actualizado a las 11:55 h.Joseph Blatter no está dispuesto a permitir que nada ni nadie arruine la que considera su gran obra, el Mundial de Sudáfrica 2010, del que se pregunta si no está siendo afectado por cierta forma de racismo europeo. «¿Tienen miedo al contacto? ¿Son problemas de racismo, culturales? ¿Por qué no se quiere ir ahora a Sudáfrica?», se pregunta el presidente de la FIFA durante una entrevista realizada en Vancouver previa a su viaje a Sudáfrica, donde celebrará que mañana faltarán 100 días para el inicio del Mundial. La primera Copa del Mundo en África recibió en las últimas semanas fuertes críticas. El presidente del Bayern Múnich, Uli Hoeness, llegó a definirlo como «una de las decisiones más equivocadas» de Blatter. No fue el único. La prevención creció tras el atentado sufrido por la selección de Togo en enero durante la Copa África en Angola. Blatter asegura que nunca dudó de que Sudáfrica sería sede del Mundial.
-¿Cuándo fue la última vez que se dijo a sí mismo, «no, no va a poder ser, el Mundial no se celebrará en Sudáfrica?
-Jamás pensé en eso. Nunca.
-Pero advirtió repetidas veces acerca de un plan B si las cosas no funcionaban...
-Sí, ejercimos presión, pero para que se avanzara, para que el Gobierno también hiciera algo. Pero nunca dudé de que haríamos el próximo Mundial en Sudáfrica. ¡No! ¡Fue lo correcto! Lo va a ver, va a ser incluso muy bueno. Eso fue para ayudar a los sudafricanos, para hacer un poco de ruido. Lo dije, sí, y el plan B era Sudáfrica, y el plan C, Sudáfrica.
-¿Quiénes son los que no quieren ir a África?
-El problema es que no se confía en que los africanos puedan sacar adelante un Mundial. El otro, que los europeos piensan que por qué un Mundial allí, que ellos lo pueden hacer mejor. Sí, seguro que pueden hacerlo mejor, pero eso ya lo sabemos. Y el tercer problema es que Blatter lo logre. Pero esto no tiene que ver con Blatter, fue una promesa del por entonces secretario general, y hoy presidente, de que debíamos ir a África.
-Pero insisto, ¿dónde está el problema?
-Se quiere ayudar a los africanos, se les quiere dar algo, todas las grandes instituciones, desde Bill Gates a Bill Clinton... Todos dan medicamentos, dinero y así. Todo eso es muy lindo, pero cuando se trata de obsequiar un poco de confianza, de visitarlos, entonces tienen miedo. ¿Por qué tienen miedo? ¿Tienen miedo a ser tocados, son problemas de racismo, culturales? ¿Por qué no se quiere ir ahora a Sudáfrica? ¿Por qué?