El Valencia abusa de un Villarreal que se quedó con diez

Alfonso Gil

DEPORTES

18 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El Valencia ganó con autoridad al Villarreal en un partido que le asienta como tercero de la Liga española y en el que el equipo visitante acusó jugar una hora en inferioridad tras la expulsión de Kiko.

El Valencia fue mejor en el cómputo del partido, tanto por los cuatro goles que marcó como por el control del juego que tuvo durante muchas fases del encuentro, lo que no impidió que algunas lagunas como la del gol del Villarreal, empañaran la contundencia de su triunfo.

Los visitantes trataron de hacer su juego en algunas fases del partido, pero tuvieron muy poca llegada a la meta de César y acusó en gran medida la inferioridad numérica, en un encuentro en el que Diego López, su portero, fue el mejor. El equipo de Mestalla entró en el choque con más intensidad, hasta el punto de, en una buena combinación entre Villa, Silva y Banega, estrenar el marcador en el minuto siete.

Banega lanzó un disparo imposible de detener y adelantó a su equipo, lo que dio pasó a una fase del partido más igualada, en la que aunque el Villarreal hilvanaba un mejor fútbol que el conjunto local, sus opciones de gol apenas existieron, ya que las llegadas del Valencia a la meta de Diego López eran más peligrosas.

Jugada clave a la media hora

En el minuto 27 se produjo la jugada clave del partido, cuando Villa le robó un balón a Kiko y se marchó sólo en dirección a la portería de Diego López. El defensa del Villarreal le persiguió, le agarró en una acción que los jugadores visitantes consideraron se había producido fuera del área, aunque la caída llegó cuando el delantero local ya estaba dentro. El árbitro pitó penalti y expulsó a Kiko. Villa hizo el 2-0.

Los visitantes retrasaron a Bruno para jugar como central Y David Fuster dejó la media punta para jugar en el centro, hasta que tras el descanso cedió su puesto a Ibagaza.

A partir del 2-0, el Valencia trató de manejar el balón, con posesiones largas que desgastaran físicamente al Villarreal que, pese a la inferioridad numérica, consiguió controlar la pelota, aunque de manera ocasional.

La entrada de Ibagaza dio más consistencia a los de Valverde tras el descanso, pero en un contragolpe por la izquierda y tras un error de Capdevila, Silva puso el 3-0 en la primera acción ofensiva.

Tras un balón de Silva al larguero, un error garrafal de Alexis y César permitió que Nilmar marcara para los visitantes pocos minutos después.

El Villarreal, con diez, no era menos, aunque a la contra el conjunto local tuvo varias ocasiones para ampliar la ventaja que obligaron a que Diego López se luciera.

En la enésima llegada clara, Villa cerró la victoria más clara de su equipo en lo que va de campeonato.