Michael Phelps volvió a lo más alto del podio 24 horas después de perder la final de los 200 metros libres ante el alemán Paul Biedermann. Ayer, el nadador de Baltimore se desquitó de la decepción que sufrió el día antes, y en la final de los 200 mariposa, una de sus mejores distancias, ganó su primera medalla de oro individual en los Mundiales del 2009 y estableció un nuevo récord del mundo rebajando el que él mismo tenía desde los Juegos Olímpicos de Pekín (13 de agosto del 2008). Phelps hizo 1:51.51 por 1:52.03 de hace un año para batir al polaco Pawel Korzaniowski, medalla de plata con 1:53.23, y al japonés Takeshi Matsua, bronce con 1:53.32.
El americano repitió su habitual bañador, el mismo con el que el año pasado logró sus ocho oros olímpicos en Pekín, una prenda «más lenta» que el Arena de Biedermann del día antes, pero en esta ocasión no dio opción a ninguno de sus rivales e hizo todos los pasos parciales en cabeza de la prueba.
El estadounidense suma con esta su tercera medalla en Roma tras la de oro del relevo 4x100 del domingo y el bronce de los 200 libres del martes.
Otro marca para Pellegrini
Por su parte, la italiana Federica Pellegrini volvió a poner boca abajo a la piscina olímpica de la capital italiana al batir el récord del mundo de los 200 metros libres e imponerse en la final a las estadounidenses Allison Schmitt, medalla de plata, y Dana Vollmer, bronce. La italiana, oro en los 400 metros libres, hizo 1:52.98, para bajar los 1:53.67 que logró el martes en las semifinales.
La cruz para los italianos llegó en los 100 metros libres masculinos, en los que el campeón del mundo, Filippo Magnini, quedó fuera de la final con un tiempo de 48.04, noveno, por los 47.27 del campeón olímpico, el francés Alain Bernard, que logró la mejor marca de las semifinales; el brasileño César Cielo, campeón olímpico de los 50 libres, segundo con 47.48; y el sueco Stefan Nystrand, tercero con 47.53.
En Melbourne 2007, el canadiense Brent Hayden empató con Magnini en la final de esta distancia. Ayer, en Roma, hizo 47.88 para imponerse en la serie en la que el italiano quedó fuera.