Fisher: «Se lo debía a mis compañeros por la confianza que pusieron en mí»

Efe

DEPORTES

El artífice de la victoria de losLakers en el cuarto partido se felicita de sus dos triples decisivos.

12 jun 2009 . Actualizado a las 10:55 h.

El veterano base Derek Fisher volvió a justificar su continuidad como titular de Los Ángeles Lakers con dos triples milagrosos que permitieron a su equipo ganar por 91-99, en tiempo de prórroga, el cuarto partido de las Finales de la NBA frente a los Magic de Orlando. Fisher, de 34 años, que había fallado los primeros cinco tiros que había hecho en el partido surgió con los dos que cambiaron la historia del partido, el primero para forzar la prórroga y el segundo para abrir el camino del triunfo.

«Lo único que me importa es ayudar al equipo y creo que siempre lo hecho en los momentos decisivos con este tipo de tiros», comentó Fisher. «Aunque reconozco que (Jameer) Nelson me dejó mucho espacio en el primer triple del tiempo reglamentario, tenía confianza que podría entrar el balón». En el segundo, Fisher no quiso comentar de la acción del codazo que el escolta Kobe Bryant le dio a Nelson para tirarlo al suelo y dejarlo a él sólo, pero si destacó que «también estaba seguro que iba a ser canasta».

Fisher, que pasará a la historia con los Lakers por los triples milagrosos en la competición de la fase final, dijo que todos dentro del equipo le habían dado la confianza.

«Desde el entrenador Jackson (Phil), al que considero el mejor del mundo, como el resto del cuerpo técnico y a mis compañeros les debía esta actuación por toda la confianza que pusieron en mi», destacó Fisher. «Hemos logrado no sólo el triunfo sino también recuperado la moral para acercarnos al título».

Howard

Por su parte, el pívot estrella de los Magic de Orlando, Dwight Howard, no pudo ocultar su «disgusto» por la manera como el equipo y el mismo habían dejado escapar otro triunfo que tenían en su manos. «Todo esto es ridículo, cuando tendríamos que estar 3-1 en la serie, resultado que nos encontramos con 1-3 en contra, y no por los aciertos del equipo rival sino por los fallos nuestros», declaró Howard, que hizo todo bien en el partido menos tirar desde la línea de personal en los momentos clave.

Howard, que logro un doble-doble de 16 puntos, 21 rebotes y nueve tapones, la mejor marca en la historia de las Finales de la NBA, fue incapaz de anotar los dos tiros de personal que con 11,1 segundos para concluir el tiempo reglamentario le hubiesen asegurado a los Magic el triunfo al tener parcial de 87-84.

«Qué puedo decir, nada, simplemente que fallé», declaró con seriedad Howard. «He trabajo los tiros de personal, pero esta noche no entraron». Howard falló nada menos que 8 de 14 tiros de personal y el equipo 15 de 37 para quedarse con un porcentaje del 59,9 por ciento de acierto. «Los Lakers tienen el mérito que se aprovecharon al máximo de nuestros errores, pero el partido, como sucedió en el segundo de la serie, no lo ganaron ellos lo perdimos nosotros». destacó Howard.